Salamanca, Guanajuato.- Enclavado en la zona centro de la ciudad, el Santuario de Guadalupe es visitado por cientos de feligreses salmantinos, que acuden con atuendos indígenas a los rosarios que se rezan los once días previos al 12 de diciembre, día que se celebra la festividad en honor a la Virgen de Guadalupe.
El recinto religioso data del Siglo XVII e inicialmente se le denominó Capilla de San Juan Nepomuceno, pero al poco tiempo cambió su nombre y se instituyó como el Santuario de Guadalupe, una obra arquitectónica con fachada de cantera estilo neoclásico.
En su primera etapa el Santuario de Guadalupe se edificó con una torre de un solo cuerpo, posteriormente entre los años 1854 y 1855, el capitán de origen español, Cayetano Martínez, ordenó construir el segundo cuerpo de la torre y también se hizo un remate piramidal con cruz de hierro.
Otras remodelaciones se hicieron en la fachada y la portada del muro del atrio, el altar mayor de diseño neoclásico reconstruido en 1893 con reminiscencias del altar mayor de la Basílica Nacional de Guadalupe de la Ciudad de México.
Otros aspectos que destacan en este recinto religioso son: la puerta de herrería del atrio que fue elaborada e instalada en 1910. Sin embargo, lo más emblemático es el altar mayor que tiene en la parte central una pintura al óleo sobre lienzo y enmarcada, dedicada a la Virgen de Guadalupe, una reliquia religiosa que data del año de 1791.