Salamanca, Guanajuato.- La comunidad de Valtierrilla se vistió de fiesta para honrar a su santo patrono, Bernabé de Jesús Méndez Montoya, mártir que fue fusilado el 5 de febrero de 1928 durante la persecución cristera.
Como cada año, llegaron hasta la capilla de la Señora de Guadalupe feligreses de Salamanca y de diversos municipios de Guanajuato y otros estados del país para venerar y agradecer a San Bernabé algún favor o milagro recibido.
Yo tengo diabetes y una de mis piernas estaba muy mal y había riesgo de perderla, también tenía muchos problemas con mis ojos, ya casi no veía y me sentía muy desconsolada, escuché que el santo de Valtierrilla era muy milagroso y vine a verlo para pedirle que me ayudara, San Bernabé me escuchó y como un milagro mi pierna está sana y me alivie de mis ojos, por eso cada año vengo de Irapuato a visitarlo”, comentó María Isabel Ramírez.
Gracias a San Bernabé volvió su hijo
Fidel Prieto es un hombre de edad avanzada que le agradece a San Bernabé de Jesús Méndez Montoya que le haya hecho el milagro de volver a ver a su hijo.
Mi único hijo se fue a trabajar a Estados Unidos y de repente ya no supimos de él, pasaron muchos años y no regresó, lo fuí a buscar, pero no lo encontré, pensé que ya había muerto, un día que pasamos por este ranchito me metí a la iglesia, vi la imagen del santo y me puse a rezar, le pedí por mi hijo y a los pocos días que llega mi hijo a la casa, ese fue un milagro de San Bernabé”, dijo con voz emocionada don Fidel.
La capilla de Guadalupe fue cubierta con flores, pero por la gran cantidad de devotos la misa concelebrada se ofició en el Jardín Principal de Valtierrilla, a lo largo del día hubo música de banda y por la noche hubo verbena con quema de fuegos pirotécnicos y baile.
¿Quién fue San Bernabé?
Bernabé de Jesús Méndez Montoya nació el 10 de junio de 1880 en Tarímbaro, Michoacán.
En 1894 ingresó al Seminario Tridentino de Morelia. Recibió la ordenación sacerdotal el 3 de junio de 1906. Desempeñó su ministerio sacerdotal en Huetamo, en Pedernales y en Valtierrilla.
Fue beatificado el 22 de noviembre de 1992 y canonizado por Juan Pablo II, junto a otros 26 cristianos mexicanos, el 21 de mayo del año 2000.
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