Salamanca, Guanajuato.- El Parque Ladrillero de Salamanca es un proyecto que nació bajo el concepto de Centro de Trabajo de la Industria Sustentable de Insumos para la Construcción; sin embargo, en 3 administraciones municipales su operatividad ha sido mínima o casi nula y será entregado en comodato al Gobierno del Estado.
Lo anterior fue dado a conocer por la secretaria de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial (SMAOT), María Isabel Ortiz Mantilla. Indicó que el tema se llevará al cabildo de Salamanca y se generará un convenio de colaboración Estado-Municipio. “Ellos eran los responsables del mantenimiento y no funcionó del todo bien, entonces planteamos un nuevo modelo, nos lo van a dar en comodato al Gobierno del Estado, porque al final es un predio municipal”, refirió la titular de SMAOT.
Ortiz Mantilla explicó que se deben generar nuevas reglas para que el Parque Ladrillero funcione como una escuela que instruya sobre la producción adecuada de ladrillos. El objetivo es reducir la inversión de recursos económicos, disminuir las emisiones contaminantes y atender temas como el agua y arcillas entre otros.
Ocho años como asignatura pendiente
El proyecto del Parque Ladrillero se remonta al año 2015, está ubicado en la comunidad de San José de Uluapa, a espaldas del Rastro Municipal, equipado con 3 hornos tecnificados que reducen de manera significativa las emisiones contaminantes y tienen capacidad para producir 5 mil ladrillos.
En su momento, se informó una inyección económica de 2 millones de pesos para el equipamiento con hornos de energías renovables y multicámara tipo MK2, instalación de malla ciclónica y red para el suministro de electricidad, gas y agua potable. Esto lo convirtió en el primer parque ladrillero del Estado y el País con estas características. También lo convirtió en un “elefante blanco” que lleva 8 años sin operar al 100 %.
Poco interés de los productores
En las últimas décadas el padrón de productores de ladrillo en Salamanca ha disminuido de forma abrupta. En algún tiempo llegaron a ser más de 50, actualmente solo subsisten alrededor de 15. Las arduas jornadas de trabajo y el estrecho margen de utilidad económica que se genera, aunado a la competencia foránea, han mutilado a este sector.
Una realidad es que los productores de la localidad han mostrado muy poco interés en migrar a trabajar al parque ladrillero, consideran que no es redituable y han llegado a manifestar que podría ser el último clavo en el ataúd de esta actividad económica.
CA