León, Guanajuato.- El problema del sobrepeso y la obesidad es grave, 7.5 de cada 10 adultos y 6 de cada 10 niños la padecen, de ahí la importancia de informarse, conocer la enfermedad y las opciones de tratamiento, pero sobre todo, de modificar el estilo de vida.
Una de las opciones para quienes han intentado todo para bajar de peso es la cirugía bariátrica la cual brinda resultados siempre y cuando se siga un protocolo y que el personal que la realice esté certificado.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ofrece este procedimiento en algunos de sus hospitales del país que cuentan con Clínicas de Obesidad y Cirugía Bariátrica, entre ellos los Hospitales de Especialidades del Centro Médico Nacional (CMN) Siglo XXI, en el Centro Médico de Occidente en Guadalajara, Jalisco y en el Hospital No. 25 de Monterrey, Nuevo León.
Los candidatos a una cirugía bariátrica son mujeres y hombres de entre 18 y 70 años de edad con exceso de peso de 40 kilos o más y que han llevado un programa de dieta y ejercicio sin lograr los resultados deseados y también aquellos que tienen otras complicaciones derivadas de su sobrepeso.
Especialistas en bariatría señalan que la cirugía, además de ayudar a bajar de peso, permite el control exitoso de la diabetes mellitus tipo 2 y que se ha visto que en promedio, durante 10 años tras la operación, el paciente no tendrá necesidad de medicamentos antidiabéticos, incluyendo la insulina, lo que repercute de inmediato en una mejor calidad de vida.
También se ha demostrado que ayuda a controlar enfermedades como la hipertensión arterial, elevación del colesterol o triglicéridos, apnea obstructiva del sueño y síndrome metabólico, entre otros padecimientos crónicos.
La operación consiste en disminuir la capacidad del estómago mediante una cirugía de mínima invasión por vía laparoscópica y la realización de un puente intestinal que disminuye la absorción de una parte de los nutrientes que aportan los alimentos, lo cual favorece la pérdida progresiva y controlada de kilos, así como la resolución de enfermedades metabólicas asociadas a la obesidad.
Los derechohabientes del IMSS que reciben cirugía bariátrica no bajan de peso de manera inmediata, sino que logran su peso ideal en un periodo de 18 a 24 meses, y es posible que se mantengan así durante 20 años o más siguiendo una alimentación saludable y haciendo ejercicio.
Para lograr esto se trabaja con un equipo multidisciplinario integrado por personal de nutrición y de psicología y por un entrenador personal y psicóloga quienes contribuyen a ayudar a que el paciente baje el exceso de peso, tenga una mejor salud y calidad de vida.
Si no se sigue el tratamiento con un psicólogo, nutriólogo y se da seguimiento, el riesgo de recuperar el peso estará presente entre un 15 y 20% en las personas que se operan, por eso es importante que un paciente que va a ser operado lleve un tratamiento multidisciplinario y le dé continuidad después de la cirugía.
Los beneficios
Se pueden resumir en cuatro cosas
- Bajar de peso
- No recuperarlo
- Mejorar la salud
- La calidad de vida