La vida de 4 mujeres y sus familias cambió radicalmente con el diagnóstico de cáncer, a partir de ese momento, sus miedos, sus esperanzas y su constante lucha se han convertido en parte de sus armaduras con las cuales lograron vencer a la enfermedad y convertirse en sobrevivientes feroces.
Laura Corona de 51 años, se congeló y dejó de percibir lo que pasaba a su alrededor cuando le diagnosticaron cáncer de mama.
“¡Es cáncer! Fue lo único que pude escuchar. Por mi mente pasaron tantas cosas y solo pude decir ¿qué opciones tengo?”, cuenta.
“Esa no es la parte difícil, ni tampoco comunicarlo a mis seres queridos, sino digerir tremenda noticia. Lloré toda la noche por la frustración, incertidumbre y miedo, mucho miedo”.
Después de platicar con el doctor, le reveló que su diagnóstico era una mastectomía radical con extensión axilar y necesitaba un tratamiento de quimioterapia y radiación.
“Gracias a Dios yo conté y cuento con el mejor equipo: mi familia, que incluye a mis amigos, además de extraordinarias mujeres compañeras de tratamiento, Cruz, Magda, Inés, Araceli y Cari.
“Hoy agradezco a Dios por el aprendizaje y la lección de vida. Atesoro esta nueva oportunidad de la mano de mi familia y amigos, y me siento orgullosa de decir que tuve mucho miedo, pero con actitud positiva, muchas sonrisas lo vencí, hoy puedo decir que soy sobreviviente de cáncer de mama”.