San Miguel de Allende, Guanajuato.- Hace dos años, Alpha, un perro de raza husky, fue torturado y asesinado en San Miguel de Allende. Su caso fue llevado a los tribunales y hasta hoy su presunto asesino sigue sin castigo, por lo que su familia y rescatistas exigen justicia.
La Unión de Rescatistas Independientes hizo un llamado hace unos días a la Fiscalía para que el maltrato animal y asesinato de mascotas sea un delito y deje de aparecer en el catálogo de medio ambiente, y por lo tanto como un hecho que no merezca castigo.
“El hecho lleva su proceso, pero no debe quedar impune, este es un llamado que hacemos a las autoridades, legisladores y Fiscalía del Estado, de que estos hechos deben de tener una sentencia favorable, pero también deben aumentar las penas, porque con todos los casos que hemos tenido no hemos podido llegar a una sentencia máxima”, comentó Elizabeth Chacón, representante de Unión de Rescatistas Independientes.
La activista enfatizó que en caso de que se llegue a sentenciar este hecho marcará, ya que sería la segunda sentencia que se haga por asesinato y maltrato animal, el primero que se realizó fue el del gato Becker, en León.
Durante la rueda de prensa que ofrecieron hace unos días, la familia de Alpha relató cómo habían sido los hechos y que la muerte del perro fue realizada por el propietario de un rancho donde el perro tuvo contacto con algunas ovejas.
El presunto asesino había dicho a los dueños que el perro mató a uno de sus borregos y que por lo tanto no lo dejaría llevárselo, él se los daría al día siguiente, pero no fue así, sus dueños encontraron a Alpha torturado y cortado a la mitad en la vías del tren.
vamos a seguir por el bien de todos los animales que han sido lastimados.”
“Han sido dos años extremadamente cansados para poder seguir este procedimiento, pero lo vamos a seguir por el bien de todos los animales que han sido lastimados, tengo que ser la voz de ellos, no podemos dejarlos al desamparo”, comentó el dueño de Alpha.
De acuerdo con el abogado de la familia de Alpha, encontraron indicios de que la mascota había sido torturada, desangrada, colgada en un árbol y después mutilada, la mitad del cuerpo fue colocada en las vías del tren, para simular que la máquina atropelló al perro cuando intentó cruzar.
Con todas estas indagatorias y evidencias encontradas, el proceso de Alpha fue llevado a la corte y van dos años en los que han tenido que demostrar que Alpha fue asesinado con alevosía y ventaja. Familiares, conocidos y rescatistas esperan que este hecho no quede impune y que pague el presunto agresor del husky.
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CA