Nadie podía consolar a Alexis Vega tras la derrota de la Selección Mexicana contra Brasil en la semifinal de los Juegos Olímpicos.
La tristeza era abrumadora para el también delantero de las Chivas cuando acabó el encuentro. Se notaba en sus ojos.
Por más de media hora estuvo sentado sobre una hielera, dentro del estadio de Kashima que poco a poco se iba vaciando. Vega volteaba hacia la portería, donde en tanda de penaltis, México cayó 1-4 ante los brasileños.
Al final ya no estuvo en sus manos. Tras un arduo partido salió de cambio al minuto 90, antes de los tiempos extra. No alcanzó ninguno de sus chispazos que tuvo en el primer tiempo y que lo habían hecho uno de los jugadores más importantes del conjunto de Jaime Lozano.
¿Qué pensaba el delantero del Guadalajara? Es difícil saberlo.
La derrota caló hondo en Alexis Vega. pic.twitter.com/mpL38k3bT6 david medrano felix (@medranoazteca) August 3, 2021
Para llegar a Tokyo 2020 pasó por un camino muy largo y con muchos obstáculos. Desde que a los 15 años, llamó llorando a su padre para decirle que estaba fuera de la cantera de los Pumas, por ser demasiado corto de estatura.
Tras una desilusión así, Vega se alejó del futbol por varios meses, hasta que en el Toluca encontró un lugar que valoró sus condiciones. Sin embargo, en apenas su irrupción como profesional, sufrió tres operaciones de rodilla.
Nunca desistió y en 2019 arribó a las Chivas con una nueva oportunidad para demostrar su potencial. De menos a más, ganó protagonismo y el cariño de la gente. Lo que también se reflejó en llamados a las Selecciones Nacionales.
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Su gran prueba serían estos Juegos Olímpicos. No titubeo y se convirtió en una de las figuras, con dos goles y dos asistencias en lo que va del certamen. Incluso atrajo reflectores internacionales, como el supuesto interés que hay del Porto por sus servicios.
Además, tenía la promesa de regresar con una medalla y un nuevo celular para su padre, como lo revelaron en una entrevista en ESPN.
Por ahora, todavía puede cumplir dicha encomienda. Alexis Vega junto a la Selección Mexicana enfrentarán este viernes a Japón por la presea de bronce.
Un partido con tintes de revancha por su anterior duelo en la fase de grupos y por lo duro que caló la derrota contra los brasileños.