Ante los últimos acontecimientos, la UEFA ha decidido que la final de la Champions League no será en San Petersburgo.
La final de la principal competición de clubes en Europa, está programada el 28 de mayo en el Gazprom Arena de San Petersburgo, en Rusia, país que fue organizador del Mundial-2018.
La UEFA ya se vio obligada a relocalizar las dos últimas finales de la Liga de Campeones, en Lisboa en 2020 y después en Oporto en 2021, debido a la pandemia de covid-19 que impedía la disputa del partido en Estambul, como estaba previsto.
El conflicto entre Ucrania y Rusia ya ha tenido repercusiones en las competiciones europeas de futbol.
Como reacción a la incursión de Rusia en Ucrania, el club alemán Schalke anunció que retiraría el nombre del gigante energético ruso Gazprom de sus camisetas.
El Comité Paralímpico Internacional dijo que estaba en conversaciones con las autoridades deportivas en Ucrania y Rusia mientras sus equipos se preparan para viajar a China para los Juegos Paralímpicos de Invierno que arrancan la próxima semana en Beijing.
“El CPI está dialogando con los Comités Paralímpicos ucraniano y ruso” antes de la cita paralímpica de Beijing, dijo la institución en un comunicado enviado por correo electrónico. “Como organización políticamente neutral, la atención de CPI sigue puesta en los próximos Juegos y no en la situación actual”.
Rusia no podrá utilizar su nombre, bandera ni himno en los Juegos, que se disputarán entre el 4 y el 13 de marzo en la capital china, por disputas previas de dopaje.