El Shakhtar Donetsk es uno de los clubes más prestigiosos del futbol ucraniano por su antigüedad en la orbe futbolística, pues con 85 años de existencia, ha logrado sobrevivir a varios temas extracancha que lo han orillado a cambiar de sede en reiteradas ocasiones.
Un club que por sí solo es un ejemplo de resiliencia al mantenerse vivo entre tantos ataques políticos entre Ucrania y Rusia, países que, el 24 de febrero, iniciaron una nueva guerra en el mundo.
El club de Donetsk que desde 2014 juega en el exilio, tuvo un vínculo con el futbol mexicano cuando contrató, a través de una transferencia millonaria, al ex delantero Nery Alberto Castillo Confalonieri en 2007.
El joven sensación
Tras militar en las inferiores del Danubio, Castillo fue traspasado al Olympiacos de Grecia donde pudo catapultar su carrera entre el 2001 y 2007.
Con sus 47 goles y 12 asistencias en 163 partidos con el cuadro griego y tras su actuación en la Copa América 2007 con cuatro goles, el delantero tricolor llamó la atención en Ucrania.
¿El equipo interesado? Shakhtar Donetsk, uno de los equipos más longevos del futbol ucraniano que apostó todo por el nueve mexicano y que contaba con unas arcas fortalecidas por negocios con petróleo y gas.
Millonaria transferencia
A pesar de que estuvo una oferta muy interesante de equipos como Sevilla y Manchester United, el amor gigantesco por el cuadro griego hizo que Nery se contuviera por mucho tiempo.
Sin embargo, en 2007 llegó el equipo ucraniano y tras largas negociaciones, ficharon al jugador subcampeón de la Copa Oro por una cifra que rondó los 20 millones de euros para convertirse, así, en el fichaje más caro en la historia del club y en el jugador mexicano por el que más dinero se había pagado.
Completa decepción
El tema extracancha fue factor para que el jugador, que en aquel entonces tenía 23 años de edad, cosechara una sola anotación en apenas ocho partidos disputados en sus primeros seis meses en la institución.
Tal y como él lo dijo en una entrevista años después, arribó a tierras ucranianas con el ánimo psicológico por los suelos.
“Me fui con un corazón negro, fui a Ucrania psicológicamente mal, luego las cosas empeoraron. Al principio no nos gustó, hacía mucho frío. Y más tarde, mi padre y mi madre murieron en el mismo año, en un mal escenario con el entrenador que ni siquiera me dejaba ir al funeral. Fui a Shakhtar y pensaba todos los días en volver a Olympiacos. Mi error fue pensar que si no jugaba allí, volvería más fácilmente”, declaró para el portal “Fosonline”.
Bagaje de equipos sin regularidad
Tratando de recuperar lo invertido en el jugador mexicano, Nery fue traspasado a equipos como FC Dnipro y Manchester City en búsqueda de recuperar al jugador del Olympiacos, fracasando en el intento.
Fue hasta 2011 cuando se desprendieron por completo de su carta, no sin antes lograr dos campeonatos: uno de liga y otro de copa; los dos, cosechados en 2008.
El club de la resiliencia
El día de hoy el futbol ucraniano ha sido suspendido indefinidamente debido a un conflicto bélico que el Shakhtar Donetsk ha venido resintiendo desde hace ocho años.
Seguramente, como lo vienen haciendo desde 2014, el club seguirá estoico para seguir acrecentando su historia como uno de los más longevos del balompié mundial.