Su entusiasmo y emoción se puede notar a metros de distancia mientras observa atento cada stand de la Expo Deporte en las instalaciones del Distrito León MX.
Con kit en mano, sigue observando qué artefacto puede llevarse entre toda la gama deportiva como calcetines, vendas, playeras, sudaderas y otros tantos productos deportivos alusivos al magno evento: el Maratón León 2022.
Acompañado de su mamá, Eduardo Escobar decide hacer una pausa en su labor para confirmar una vibra especial que ya se sentía desde antes de hablar con él.
“Desde hace nueve meses que nos venimos preparando para esta competencia, aunque estos últimos 30 días han sido muy arduos porque he tenido que hacerlo sin mi esposa”.
Eduardo vivió acompañado de su esposa Ana Lilia González durante 23 años hasta su dolorosa muerte hace un mes, por ello, esta edición 42 del Maratón León, ha tomado una connotación bastante emotiva para él.
“Este domingo correré por ella en su memoria. Ella me indujo a todo este ámbito deportivo porque siempre fue corredora y al inicio yo solamente le echaba porras. He sentido tristeza en el último mes porque siempre entrenábamos juntos, pero sé que ella está a mi lado a cada minuto y es mi más grande fortaleza”.
A tres años de distancia de su incursión al mundo del atletismo, correrá su segundo Maratón León, aunque será la primera vez que corra los 21 kilómetros.
“Todavía no me siento capaz de correr los 42 kilómetros, pero probablemente el próximo año me anime a hacerlo porque, poco a poco, hemos ido adquiriendo la disciplina, la constancia y la motivación para seguir adelante”.
Una presencia más allá de lo terrenal
El corredor de 39 años de edad siente a su esposa cerca de él en cada minuto de su vida, una que ella abandonó de manera terrenal para trascender a lo eterno, como él mismo lo percibe.
“Siento mucha emoción y nervios porque siempre corríamos juntos, pero yo sé que ella siempre está conmigo y no será la excepción el domingo. Simplemente ella me da fuerza para seguir”.
Estará junto a dos de sus más grandes amores: Jennifer y Jessica, con quienes pudo vivir momentos para el recuerdo junto a su amada.
De esta manera, Eduardo Escobar correrá una competencia en memoria de una de las personas que más ha amado su vida, alguien que, tras su partida, cambió por completo su trayecto en este mundo terrenal y que describe como “el día que cambió mi vida”.
Antes de despedirse para seguir con su recorrido, el recuerdo vino a refrescar su alma y, con algunas lágrimas escurriendo sobre sus mejillas, él simplemente resaltó: “Ana Lilia, ella es mi máxima fortaleza“.