Pasaba de la una de la tarde y bajo un intenso sol, la corredora leonesa Delia Carolina Pérez fue la última en cruzar la línea de meta tras seis horas de intenso recorrido por los 42K del Maratón León 2022.
Su llegada, además de hacer honor al nombre de su equipo, ‘Titanes’, estuvo llena de emotividad, ya que en la línea de meta la esperó con los brazos abiertos su señora madre, quien con una pequeña cartulina mostraba lo orgullosa que estaba de su hija.
“Sí se pudo, bonita, bravo, bravo”, se podía leer en el pedazo de papel que la señora portó en sus manos.
Al pasar la meta, se desplomó y lloró de alegría.
Llora de alegría
Ya en los brazos de su madre y con el apoyo de los paramédicos, Delia lloró de alegría y le dijo a su madre lo feliz que la hacía al poder encontrarla tras 42 largos kilómetros:
“Estoy muy contenta, estoy cansada, pero estoy satisfecha. Nunca pensé que esto fuera como la vida diaria, donde te topas con retos, con desesperación, donde lo puedes lograr si te lo propones”.
Así lo vivió: “Yo iba cantando, en otro punto iba llorando, pero llegué a la meta, que era el objetivo”.
Finalmente, dejó en claro que la razón más importante para recorrer este maratón fue ver la sonrisa de su madre: “Mi mami era mi objetivo para que se llevara en su mente y corazón siempre a lo largo de su vida”.