A pesar del incesante sol, su lucha persistió en sus botines durante más de 40 minutos donde, sin importar la adversidad, corrió y peleó cada balón que estuvo en disputa en los alrededores de su zona predilecta: la del ataque.
Con una diadema blanca que ayuda a recoger ese pelo largo que le rebasa los hombros, Evelyn Porras disfruta de una pasión deportiva inigualable en su vida, y es la de sentir esa adrenalina de jugar un deporte impredecible como lo es el futbol.
“Disfruto demasiado el correr, pelear y disputar cada balón como si fuera el último. Es una adrenalina que adoro y por eso me encanta tanto jugar al futbol porque, además, es impredecible y cualquier cosa puede suceder”.
Llena de sueños y metas por cumplir, Evelyn ha cosechado 10 de sus 17 años de vida jugando su más grande pasión en una travesía sinuosa y repleta de retos por superar, pues como ella misma constata, las oportunidades han sido difíciles de encontrar en un entorno bastante peleado y, en consecuencia, complicado.
“No te miento: sí ha sido muy difícil perseguir mi sueño porque si de por sí en el varonil es demasiado peleado, imagínate en el femenil donde las oportunidades son reducidas. Sin embargo, tampoco he desistido y he podido encontrar esta oportunidad con Real Pradera al cual le agradezco bastante por haberme aceptado”.
La emoción en sus ojos es indescriptible: se iluminan en cada palabra que expulsa de su boca, pues reconoce que, su más grande sueño, es llegar al profesionalismo sin importar la camiseta que llegue a vestir en la Liga MX Femenil, o bien, en cualquier latitud del planeta Tierra.
“Me ilusiona bastante porque hemos tenido un gran avance y me llena de orgullo ver hasta dónde hemos llegado. Toca seguir emocionándome y pelear por ese objetivo”.
La actual edición de la Copa Nacional León AM servirá en su desarrollo profesional y, sobre todo, personal, pues a la espera de una beca deportiva en su actual escuela, busca seguir mejorando sobre la marcha para lograr el campeonato con su equipo.
Por lo pronto, con esa lucha incesante que demuestra en cada pelota dividida y esa resiliencia que ha demostrado a lo largo de su vida, Evelyn Porras seguirá en búsqueda de la ambición anhelada: ser futbolista profesional.