¿Crees en el destino?
¿Crees que, al final, todo lo que te sucede es porque debería de ser así?
¿Crees en la superioridad del destino sobre el azar?
¿Sabes? Yo soy más de la idea del portugués José Saramago (1922-2010), quien se hizo del Premio Nobel de Literatura en 1998, pero, sobre todo, fue estrecho amigo de la ironía e imaginación.
“Lo que tenga que ser, será. Conozco esa filosofía. Suelen llamarle predestinación, fatalismo, hado, pero lo que realmente significa es que harás lo que te dé la real gana, como siempre”.
Aunque por momentos entremos en un embrollo donde satisfacer al otro supere las metas propias, siempre se impone la decisión de uno mismo de seguir, aún y cuando eso implique dejarse llevar por los demás. Todo lo que sucede, al final, es por elección tuya.
Analogía del lujo y de lo íngrimo, de la felicidad y el desasosiego, el beisbol es espejo de la vida misma porque en cada equipo y jugador, siempre existirá una situación que sea un punto de quiebre sin retorno.
Sonreímos y sonreímos mucho el pasado fin de semana porque más allá de habernos guardado por temas vacacionales, para nosotros, amantes del Rey de los Deportes, significó el regreso de las Ligas Mayores en su edición 2024.
Nos sorprendieron algunas cosas, pero nos reafirmaron algunas otras.
En estas últimas está el caso de Juan José Soto Pacheco y el idilio que comenzó a edificar con los Yankees de Nueva York.
Desde el primer momento en que firmó con los apodados Mulos de Manhattan, muchos ya presentíamos que era un ganar-ganar para ambas partes.
Parece que Soto, quien se rumora estuvo a punto de firmar con los Dodgers de Los Ángeles antes de optar por los Padres de San Diego en 2023, nació para ser un Yankee.
Presión y adaptación son dos palabras que desconoce por completo el dominicano.
Para algunos, llegar a la novena entrada con casa llena, dos outs y cuenta personal llena, es terreno hostil y, hasta cierto punto, deprimente, pero para Soto, es el paraíso predilecto para hacerse GIGANTE.
Los Yankees abrieron serie en Houston ante Astros, siendo ante este rival donde Pacheco sacó a relucir su potencial con los Nacionales de Washington gracias a tres jonrones, siete producidas y cinco bases por bola en la Serie Mundial del 2019.
El jueves 28 de marzo, cuando los Yankees ganaron 5 a 4, se fue de 3-1 con dos bases por bolas y un out en el plato que sentenció el segundo en la última entrada.
El viernes 29 de marzo, cuando los Yankees ganaron 7 a 1, bateó de 4-3 con una base por bolas y una carrera producida.
El sábado 30 de marzo, cuando Yankees vino de atrás y ganó 3 a 5, pegó jonrón en la séptima entrada y, con ello, se ayudó para irse de 5-2 con una producida.
El domingo 31 de marzo, cuando Yankees barrió la serie gracias a una pizarra de 4 a 3, se fue de 5-3 con la producción de la carrera de la victoria en la novena entrada, con casa llena y dos outs.
Así pues, tras su primera serie como jugador de los Yankees, Soto fue elegido el mejor jugador de la Liga Americana del primer fin de semana gracias a los siguientes números:
- .529 de promedio de bateo.
- 9 hits.
- 1 jonrón.
- 4 impulsadas.
- .600 OBP.
- 1.365 OPS.
“Este es el tipo de arranque que quería”, mencionó Soto y no podríamos estar más de acuerdo con él.
Hoy, quedó más que claro que, Juan José Soto Pacheco, hizo lo que le dio su gana al rechazar a los Dodgers, ir a San Diego, partir de allí, firmar con los Yankees y estar a expensas de dar un temporadón.
Predestinación, fatalismo, hado; lo que sea, pero él mismo, con una franela que pesa y una fórmula todavía indescifrable para contenerlo y desaparecer su poderío dentro del diamante, está fortaleciendo la idea de ser de los Yankees de por vida.
“Yo soy el dueño de mi destino; yo soy el capitán de mi alma”.
-William Ernest Henley.
PD: Soto tiene 37 juegos consecutivos embasándose…
-El Dugout del Gabo.