Los conocimientos y la técnica del tenis no serán vistas con los mismos ojos por los entrenadores y practicantes del también llamado ‘deporte blanco’ en León, Guanajuato. La visita de Federico Palermo, definitivamente no se trató de una simple inducción, los conocimientos del que fuera entrenador del extenista top3 mundial, Guillermo Coria, cambiaron la perspectiva con la que se ve a esta disciplina en México

Y es que mucho más allá de la ejecución de un saque, Palermo desmenuzó profundamente las técnicas de golpeo de pelota y movimientos que permiten al ser humano, perfeccionar lo que a simple vista muchos asimilan como sencillo pero que de fondo va totalmente de la mano con el desarrollo psicomotriz y la biomecánica. 

Empleando las canchas del Club Britania, el argentino compartió con más de 70 coaches sus amplios conocimientos y con una pasión que deslumbró a los ahí presentes no se cansó de explicar movimiento a movimiento lo que por allá de 2004 catapultó a Coria a los primeros lugares del ranking mundial solo por detrás de Roger Federer y Andy Roddick. 

Lo disfruto mucho, creo que lo más importante es poder ayudar un poco a que más personas puedan ver algunos de los detalles que hace a este deporte tan hermoso y sólo vimos algunos ya que hay muchos más. Busco compartir todo este bagaje que traigo en la cabeza luego de estar junto con Coria en Masters 1000, en Roland Garros y muchas competencias top”, dijo en exclusiva y sonriente para SuperDeportivo.

La esencia de Coria llevada al tenis del Bajío

Fotografía: Ituriel Pérez

Para Palermo, un verdadero apasionado de las técnicas tenísticas, lo más importante no viene con el esfuerzo físico sobre la cancha y cada entrenamiento, lo realmente trascendental de fondo es el tema del trabajo mental y para ello explicó una de sus múltiples experiencias al lado de Coria:

Para mi uno de los puntos más importantes es poder exprimir la parte emocional, esta posteriormente se puede desarrollar. Me pasó con ‘Guille’ (Coria), recuerdo con él que si hubiese querido sin duda llegaba a ser número 1 del mundo, pero lo que más me gustó de trabajar con él siempre fue su predisposición y sus ganas de entrenar no al 100, realmente a un 120 por ciento que lo llevó a constatar que era un gran tenista, eso es lo más importante, siempre querer dar mucho más de lo que podemos dar y para eso es importante trabajar fuera de la cancha también y eso poca gente lo sabe”.

¿Cómo hacer para que el tenis en México despunte nuevamente? 

Fotografía: Ituriel Pérez.

Desde las épocas de Leo Lavalle, México no ha podido tener un tenis que compita en los más profundos niveles del tenis por ello y cuestionado sobre el principal punto de ataque para solucionar y dar un giro, señaló: 

Necesitamos estar concentrados nuestro centro de gravedad cada vez más bajo, el tenis de hoy es cada vez más rápido, a mi me gustan los jugadores rápidos, livianos y que tengan gran explosividad, en el mexicano no creo que el problema pase por su altura, yo considero que la capacitación hoy en día es muy importante, enriquecer el campo cognitivo es algo fundamental para mejorar en la metodología de entrenamientos sobre todo con los niños, hay que empezar desde ahí” 

Entonces subrayó: “La cocina y sus primeros pasos se dan cuando tienen 7,8 o 9 años, ahí es cuando hay que prestarles mayor atención, poner mucho énfasis en esa etapa ya que ahí es cuando graban la mayor cantidad de movimientos fundamentales con mayor facilidad y entonces es cuando mejoran con mayor aceleración y si no trabajan bien desde pequeños van a batallar en borrar errores que serán muy difíciles de quitar en el futuro”, dijo. 

Palermo junto con Coria en Argentina.

Y finalmente destacó:

Posteriormente es importante la especificidad ya que el jugador obviamente va subiendo de nivel y por ende la exigencia también se va presentando, el entrenador debe estar prestando atención a lo que pasa con su jugador desde chico para irlo formando en un verdadero alto nivel de detalle, esto permitirá que cuando tenga 18 años ya pueda ponerse a pensar en ser un gran tenista”. 

Fue a lo largo de 7 días que Palermo brindó de manera muy amable y siempre amistosa su gran pasión por el tenis, dejando así una visión completamente diferente en la manera de trabajo con las nuevas generaciones. 

“Yo de México me voy muy contento ya que en este país hermano, con gran calidez, siempre será muy grato poder compartir un poquito de lo que tanto nos gusta”, concluyó. 

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