Hubo descanso en las Series Divisionales de la Liga Americana, más no en las de la Liga Nacional. Por ello, las emociones no se escaparon, sino todo lo contrario: se intensificaron a más no poder. 

Después del juego del domingo, ambas series viajarán tanto a Nueva York como a San Diego para definirlas allí mismo, o bien, buscar un último y decisivo. 

Los Súper Mets

No, no solo son los Mets de Nueva York: son los Súper Mets de Nueva York. 

La intensidad con la que juegan cuando las acciones entran en su parte más decisiva, es de admirar y aplaudir. 

Aunque perdieron el segundo juego con un walk off de los Filis de Filadelfia, su capacidad ofensiva sigue siendo mortífera. 

Con dos en la tercera, una en la sexta y séptima, además de dos más en la novena para emparejar el juego, hicieron de los Mets un equipo animador en esta serie de locos. 

El más encendido, sin lugar a dudas, fue el antesalista y segundo en el orden Mark Vientos. De 4-3 con dos jonrones incluidos y cuatro impulsadas que pusieron a soñar a la fanaticada. 

No sé qué suceda con ellos, pero los Mets se irán no solo como eso, sino como los Súper Mets. 

Filadelfia y Dodgers… muchas dudas

Sí, los Filis ganaron en su casa y emparejaron la serie, pero su pitcheo está decepcionando y bastante. 

Christopher Sánchez lanzó una ruta considerable de 5.0 IP, 5H, 2R, 1BB y 5 SO, pero el relevo comenzó a tener deficiencias y no pudieron respaldar por completo la labor de su compañero. 

Si bien Carlos Estévez puso cierto orden después de José Ruíz y Orion Kerkering, Matt Strahm falló en su labor de cerrar el juego en la novena entrada, donde recibió el segundo y mortífero jonrón de la noche para Vientos, que emparejó las acciones y orilló a un innecesario dramatismo. 

Este caso es similar al de los Dodgers de Los Ángeles. Muy mala idea comenzar con un abridor tan insípido como Jack Falherty. No dudo que tenga calidad, pero no es de playoffs y ayer, en el segundo ante los Padres de San Diego, quedó más que demostrado, al admitir cinco hits y cuatro carreras, además de solo ponchar a dos en 5.1 entradas

Por si fuera poco, cayó en el juego de Manny Machado. A pesar de que llegó a poncharlo, perdió los estribos, haciéndose de palabras con un antesalista, al que poco le importó. 

Anthony Banda y Daniel Hudson fueron los únicos dos relevistas rescatables de los cinco que desfilaron, pues Ryan Brasier recibió dos carreras, Michael Grove una y Edgardo Henríquez tres. 

Esa pizarra de 2 a 10 vaya que cala hondo en el ánimo y mucho dependerá de Dave Roberts y los líderes en la cueva para salir avantes de ello. 

La ofensiva de los Padres… cuidado

Los Padres de San Diego son ese equipo que siempre hará falta en los playoffs. Con el mote de villanos y pedantes, su presencia le da sabor a una postemporada que luego suele estar ávida de ello. Y es que no solamente es eso, sino que son MUY BUENOS a la ofensiva. 

Ayer, en Dodger Stadium, explotaron con dos rallies de tres carreras en la octava y novena entrada. El villano favorito de Los Ángeles respondió con creces: Fernando Tatis Jr., quien se fue de 4-3 con dos jonrones, tres anotadas y misma cantidad de empujadas. 

Por si fuera poco, el As de Yu Darvish no desentonó y lanzó una ruta parecida pero no igualitaria a la de Michael King, pues solo permitió tres hits, negoció dos bases por bola y recetó tres ponches en 7.0 entradas. Una auténtica salida de calidad. 

Ahora, en Petco Park, tienen todo para ganar y, con ello, echar a los Dodgers de Los Ángeles por segunda vez consecutiva. 

De pilón: Todo con moderación…

Está bien que los ánimos se calienten en el diamante, pero hay un límite que no se debe de rebasar entre fanáticos y peloteros y viceversa. 

En Dodger Stadium, se vivió esta situación con Jurickson Profar y una situación poco ortodoxa con la afición local. 

El jardinero izquierdo se quejó de insultos y algunos objetos lanzados en su contra durante el cierre del séptimo rollo, sin siquiera decir que se la pasó ‘calentando’ el ambiente cada que pudo hacerlo. 

Ya ni decir de la actitud de Tatis Jr., que es un pelotero de muchísima calidad, pero que al meterse con la afición angelina, demuestra que se puede quedar estancado por esa enorme MADUREZ que todavía no alcanza. 

A toda acción corresponde una reacción y, en este sentido, ambas partes estuvieron mal. Ni uno ni otro actuaron bien. Tanto los peloteros como los aficionados no tienen el derecho de hacer lo que hicieron. 

En fin, todo con moderación. 

-El Dugout del Gabo. 

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *