A diez meses de la inundación en Tula algunas instalaciones de dependencias municipales y estatales, así como escuelas, no han sido rehabilitadas en su totalidad, por lo que el diputado Octavio Magaña Soto buscará que en el próximo presupuesto de egresos 2023 se etiqueten recursos para esos trabajos.

La madrugada del 7 de septiembre de 2021 el centro de la ciudad de los atlantes amaneció bajo el agua y con él varios comercios, casas y hasta oficinas gubernamentales tanto de entes municipales como estatales, mismas que hasta el momento no han sido arregladas, aseguró el legislador del distrito XIV por Tula de Allende.

Como ejemplo, Magaña Soto mencionó los juzgados que se encuentran en el centro de la cabecera municipal y que sufrieron los estragos por el elevado nivel que alcanzó el agua desbordada del río Tula.

Según mencionó el asambleísta del Partido Verde Ecologista (PVEM), los trabajadores de los juzgados realizan sus labores en otro espacio proporcionado por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), no obstante, espera que pronto puedan regresar a sus instalaciones para reestablecer su mecanismo de archivo y documentación.

“Ellos (personal de los juzgados) están en un espacio muy reducido y han podido hacer su trabajo; sin embargo, tienen que reestablecer todo el mecanismo de archivo y documentación y esperamos que ya lo logren en el espacio que se está rehabilitando poco a poco”, externó.

PEDIRÁN RECURSOS PARA ESCUELAS DAÑADAS

Al igual que las dependencias de gobierno, otras zonas que no han sido rehabilitadas en su totalidad son las escuelas; mencionó que incluso la primaria Venustiano Carranza, ubicada de igual manera en el centro de Tula, regresó a clases sin contar con la infraestructura para el servicio de agua en sanitarios.

De acuerdo con Octavio Magaña, la situación en dicho plantel fue mencionada durante la comparecencia del titular de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), Atilano Rodríguez Pérez, no obstante, la escuela decidió regresar a clases presenciales.

“Cuando vino a comparecer el secretario de educación pública se cuestionó sobre si en Tula las escuelas dañadas ya estaban listas para regresar a clases, pero se puede constatar que no es así, en la Venustiano Carranza no cuentan con agua para bombear para los baños y así regresaron a clases”, puntualizó Magaña Soto. 

De acuerdo con el legislador, dichas instituciones, tanto educativas como gubernamentales, han sido abandonadas en cuestión de apoyo tras la inundación de septiembre del año pasado, por lo que ya analizan la petición de un presupuesto para su recuperación completa.