El registro de mascotas y animales de compañía en Tulancingo se realizará a través de una plataforma digital que entraría en operación en un plazo de dos a tres meses, anunció Erika Miralrío Medina, directora de Sanidad municipal.

A pesar de ser obligatorio, de acuerdo con lo establecido en el artículo 6 del Reglamento Municipal de Tenencia, Protección y Trato Adecuado a los Animales, el registro de mascotas y animales de compañía está suspendido desde octubre de 2018.

La funcionaria aseguró que revisan los detalles para iniciar la operación de la plataforma digital de registro.

PRIMER INTENTO DE REGISTRO

El 17 de marzo de 2018 la administración de Tulancingo anunció el inicio del registro de mascotas, con base en lo establecido en el reglamento que entró en vigencia en septiembre de 2017.

La meta en una primera etapa que finalizaba en octubre de ese mismo año, era realizar el registro de 6 mil mascotas y animales de compañía.

Pero al llegar a ese mes apenas sumaban alrededor de 300 registros; es decir, aproximadamente cinco por ciento de la meta de la primera etapa, tras lo cual se abandonó el registro.

EL PROCESO

Miralrío Medina indicó que con el funcionamiento de la plataforma los propietarios o responsables de una mascota ya no deberán trasladarse a alguna oficina para realizar el trámite.

En fecha posterior al registro se otorgará una placa que deberá portar la mascota para que en caso de alguna situación tengan los datos de contacto de su dueño o responsable de su cuidado.

CASI 12 MIL ANIMALES EN LA CALLE

Con base en la cantidad de vacunas antirrábicas aplicadas por las instancias a cargo del tema de salud, se calcula que en Tulancingo existen alrededor de 36 mil mascotas, de las cuales, entre 10 mil y 12 mil están en situación de calle.

Es decir, tienen dueño o responsable de su cuidado, pero están buena parte del día deambulando por la vía pública.

La funcionaria hizo llamado a quienes tienen alguna mascota a hacerse responsables de esta, tanto para que tenga condiciones dignas de vida, para evitar que puedan agredir a población vulnerable, así como para que no provoquen daño a alguna propiedad.

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