Familiares y amigos de Samy marcharon por calles de Tulancingo, exigen que se haga justicia su muerte, tras recibir un disparo la semana pasada.
El contingente caminó la mañana de este domingo, en la misma ruta que el desfile con motivo del Día de la Niño y la Niña, a unos 50 metros de distancia aproximadamente; familiares y amigos portaron pancartas en las que exigen que el proceso legal hacia el presunto responsable del ataque a la niña de siete años no se detenga.
Los integrantes de la marcha pacífica caminaron en silencio y con ropa blanca; unos metros atrás se escucharon la música y algarabía del desfile.
En la manifestación no había presencia de integrantes de alguna organización no gubernamental o representantes de grupos sociales.
LOS HECHOS
La noche del pasado miércoles 24 de abril, un sujeto disparó con arma de fuego contra el automóvil donde viajaba la niña en compañía de su familia, sobre corredor vial San José, a la altura de la colonia Rojo Gómez, en Tulancingo.
Las balas dieron hacia la niña y un hombre joven, lo que provocó que ella perdiera la vida cuando se le atendía en el Hospital General de Tulancingo, donde fue trasladada.
El muchacho también fue referido a una institución médica, donde se recupera de las lesiones que sufrió en los pulmones al también recibir impactos por arma de fuego.
LA DETENCIÓN
El presunto responsable fue detenido minutos después, la misma noche del miércoles 24, en operativo conjunto de corporaciones policiacas.
El jueves 25 se registró el cierre de la carretera y autopista México-Tuxpan, por parte de familiares y amigos de la niña, en demanda a que el presunto responsable del ataque no fuera liberado.
A ello se comprometió Francisco Fernández Hasbun, encargado de despacho de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), tras lo cual los bloqueos viales fueron levantados.
Los familiares realizaron la manifestación de este domingo en forma voluntaria y espontánea, para seguir con acciones de presión al proceso legal, y a su vez de insistir que el presunto agresor no sea liberado.