El Sistema Municipal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes en Tulancingo (Sipinna), prepara el levantamiento de una encuesta para conocer la cantidad aproximada de este sector de la población que trabaja, con pago económico o careciendo de este.
En el marco del Día Mundial contra el Trabajo Infantil que se conmemora el 12 de junio, personal de la dependencia local explicó que el objetivo de la encuesta es evitar estas prácticas, así como restituir los derechos de las infancias y adolescencias.
Será la primera vez que se aplique un cuestionario en Tulancingo que permita tener un diagnóstico de infancias y adolescencias en trabajo.
Paula López Ortiz, auxiliar del Sipinna Tulancingo, acotó que ya hay un cuestionario y técnicas para aplicarlo, sólo queda pendiente el momento en que el estudio será levantado.
Entre los principales puntos que contiene el cuestionario se contempla que se pregunte si además de trabajar, las niñas, los niños y los adolescentes estudian, además de conocer el horario de esta última actividad.
CONSIDERACIONES
Además de considerar si tienen tiempo para actividades recreativas y de esparcimiento, el entorno de los encuestados (rural, urbano, mixto), entre los más importantes.
Con ello se podrá tener el panorama más completo en cada sector social y económico, y con ello diseñar los programas y acciones de restitución de los derechos del sector.
DISEÑO DE PROGRAMAS
De acuerdo con Sipinna Tulancingo se espera levantar el cuestionario y realizar el análisis de los datos recabados para a continuación iniciar el diseño de los programas y acciones para la restitución de derechos a dicho sector de la población.
Este estudio sería el segundo que elabore Sipinna Tulancingo; a finales del año pasado presentó una encuesta para conocer el nivel de seguridad que perciben niñas, niños y adolescentes dentro de sus propios hogares.
Con los resultados de dicha encuesta que derivó en un estudio, realizado en colaboración con la organización civil World Vision, se han elaborado planes para mejorar los niveles de confianza hacia sus propios padres.
Pues el estudio y la encuesta de la que se deriva, reveló que apenas el ocho por ciento de niñas, niños y adolescentes acudiría a sus propios padres en caso de tener o percibir una situación de violencia.