Instancias de seguridad pública en la región Tulancingo, así como la oficina local de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), piden no aceptar préstamos de dinero ofrecidos informalmente.
Ante el regreso a clases a partir del lunes 26 de agosto, padres y madres de familia deben enfrentar gastos para la adquisición de útiles escolares, ropa, así como para el pago de imprevistos.
Desde hace un par de semanas se ha registrado el aumento en la colocación de anuncios pegados en postes y paredes, ofreciendo préstamos de dinero “con mínimos intereses y sin consulta en el buró de crédito”.
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En los anuncios, así como volantes que también son distribuidos en la calle, en algunos casos vienen nombre y datos de supuestas financieras.
En otros, se refiere el nombre de una persona, así como un número telefónico o de WhatsApp para hacer contacto y solicitar el préstamo de dinero.
La Condusef constantemente ha solicitado a quien requiera estos servicios con supuestas financieras, consulte en su portal digital aquellas que cuentan con registro y, por tanto, autorización para dicha actividad.
En el caso de las personas físicas se recomienda que definitivamente no se acepten préstamos económicos, pues no cuentan con ninguna autorización para ofrecer el servicio.
SIN CONTRATOS NI AVAL
Tanto los particulares como las financieras no registradas no cuentan con contratos que estén avaladas con documentos revisados y garantizados en sus términos legales por la Condusef.
Por lo que una persona que solicite un préstamo de dinero con este tipo de entidades no registradas, puede ser víctima de un engaño, o de abusos en los términos en los que se cobre el préstamo.
Incluso no podrían presentar una demanda legal o sería muy complicado, precisamente por la falta de legalidad de las financieras no registradas, así como de los prestamistas particulares.
Mientras que las instancias de seguridad pública señalan que aceptar prestamos en instituciones financieras no registradas o con particulares no autorizados, pone en riesgo incluso la integridad del solicitante o de sus familias.
Por una parte, porque pueden tratarse de grupos criminales, conocidos como “goteros”, que realizan los cobros incluso con métodos violentos o intimidatorios.
Además, dichos grupos, así como las financieras no registradas, pueden usar los datos personales de los solicitantes de los préstamos de dinero para usurpar identidades y con ello cometer delitos, o pedir otros préstamos que no llegarán a la persona.