La seguridad será el tema principal de las campañas electorales del 2024. Nunca, desde que tenemos memoria, la violencia y los homicidios dolosos habían llegado a tan alto grado.
En el país, si nada cambia, el número superará las 200 mil muertes en el sexenio. En Guanajuato podría llegar a las 20 mil víctimas. Eso sin contar las y los desaparecidos.
Por eso sería bueno que iniciemos una discusión nacional y local sobre el tema con quienes desean relevar a los actuales gobernantes. ¿Qué proponen los precandidatos? Si los abrazos y no balazos resultaron sólo un fallido lema de campaña, ¿qué es necesario hacer para recuperar la paz y la seguridad perdidas?
En Guanajuato llevamos tiempo discutiendo la necesidad de hacer cambios en la Fiscalía y la Secretaría de Seguridad Pública. La razón es simple: no hay buenos resultados. Pero, ¿sólo con el cambio de responsables mejorará la situación o podría empeorar? Estas preguntas las debe responder cualquiera que aspire a gobernar el estado y los municipios. Es el requisito mínimo de una democracia, el diálogo permanente entre gobernantes y gobernados.
En lo nacional, la oposición en alianza debe iniciar una discusión sobre el tema con el diálogo o el debate entre precandidatos. Es urgente una organización inmediata de la sociedad civil y los partidos para plantear proyectos, soluciones e ideas. Tendría dos frutos. Evitar que toda la narrativa gire en torno a las llamadas “corcholatas” del presidente y oxigenar la vida política.
Imaginemos un foro con Enrique de la Madrid, Santiago Creel, Lilly Téllez, José Ángel Gurría, Gustavo de Hoyos y Damián Zepeda, entre otros. Seguro que todos los medios pondrían su enfoque en presentaciones.
Llega el tiempo en que Marko Cortés y Alito Moreno deben dejar el micrófono y su protagonismo para adelantar la causa de la oposición. La fortaleza de la sociedad civil quedó demostrada en el apoyo al INE.
En Guanajuato, Libia Dennise García, la reciente secretaria de Desarrollo Social, tendrá que dar respuesta pública al tema más pronto que tarde si no quiere dejar el espacio a la oposición de Morena. Alejandra Gutiérrez, quien es la única contendiente interna de peso dentro del PAN, lleva una carga doble, porque en León las cosas no van bien en seguridad pública. Cualquier ciudadano puede preguntar: ¿cómo es que quiere gobernar Guanajuato si el Ayuntamiento que preside no ha podido traer paz y seguridad a la ciudad?
En Celaya, Irapuato y sus zonas de influencia, la guerra sigue sin que los alcaldes tengan las herramientas para siquiera meter las manos. No sabemos aún a ciencia cierta cuál es la preferencia de los electores en el estado, pero es presumible que haya una distancia reducida entre el PAN y Morena. El blanquiazul cuenta con reserva de votos en León, pero no puede dar por ganada la elección. Sería un error.
En una encuesta sencilla (no científica) en Twitter, alguien preguntó quién era el mejor presidente de Latinoamérica. Un 72% contestó que Nayib Buquele de El Salvador. Dentro de su país 9 de cada 10 salvadoreños aprueba su trabajo. Para la gente que estaba bajo el mandato arbitrario de maras y pandillas, su presidente es un verdadero libertador.
En la CDMX, la diferencia de intención de votos entre Omar García Harfuch y la oposición, se da por el sentimiento de efectividad del joven jefe de Seguridad Pública. Los ciudadanos valoran más que nunca vivir en paz.
En la anterior carrera presidencial el tema fue la corrupción de Enrique Peña Nieto y su gobierno, ahora será la seguridad.