Tenemos una sensación de entusiasmo por lo que estamos lanzando. También nos damos cuenta de que estamos en los primeros días porque podemos ver el progreso que estamos logrando en el seguimiento”.
Sundar Pichai,
director general de Google.
Pasó un año desde que liberaron la Inteligencia Artificial con Chat-GPT 3. A los pocos meses lanzaron la versión GPT-4. La plataforma tomó al mundo por sorpresa y su adopción fue inmediata en universidades, centros de investigación y empresas de tecnología.
También tuvo un auge en las empresas como los medios de comunicación y las agencias de publicidad. Nos recuerda el boom de los punto com a principios del siglo. La emoción era tal, que infló un globo tremendo de dinero en los mercados. Lo que hoy vemos es 10 veces más importante y cien veces más veloz.
El miércoles Google abrió una nueva caja de pandora con su plataforma Gemini. Un modelo de servicio que trasciende la división entre lo visual, lo escrito y el sonido al unirlos en una sola realidad, tal como la vemos los humanos. El Chat GPT puede dar respuestas a lo escrito. Dall E, es otra plataforma para generar imágenes, incluso objetos de arte con la interacción del hombre y el programa. También se puede crear música o replicar voces humanas con diferentes aplicaciones.
Gemini promete hacer todo lo anterior en un solo paquete. Además acelera y perfecciona las respuestas que los programadores hacen sobre su trabajo. Al rebasar a Chat-GPT, presiona la competencia por el emergente mercado de las herramientas de IA.
Al ver la presentación del producto en Youtube se cae la quijada, rechinan los dientes y vivimos una euforia real por la presentación de Google. Sería largo tratar de transcribir todos los “trucos” que hace Gemini. El ingeniero que interactúa lo hace con una cámara de video que capta cualquier cosa y la interpreta de inmediato. Da respuestas instantáneas a través de su gran modelo de lenguaje. Gemini cuenta con 1.6 billones de documentos (millones de millones) de los cuales puede echar mano para responder casi cualquier pregunta que se le haga.
No es un asunto que pueda compararse con un humano. Nunca nadie podría responder de la forma en la que lo hace la plataforma. Es como un Superman de la Inteligencia en general. Cuando midan su IQ, superará al de cualquier persona.
Google había puesto en servicio a Bard, su IA basada en su buscador universal. Gemini aparece apenas a medio año de Bard. Su plena implementación, con tres niveles de potencia, comenzará a principios del 2024.
Cuando vemos que puede revisar exámenes a estudiantes de cualquier nivel, escritos a mano; cuando puede sugerir soluciones a problemas complejos de computación en minutos; o ayudar a investigadores a destilar información contenida en cientos de miles de documentos, sabemos que estamos en una nueva era.
Tengamos confianza que la propia tecnología podrá ayudar a evitar su uso maligno. Aunque siempre habrá personas que la usen para querer dañar a otros (terroristas por ejemplo), su valor para vigilar esas amenazas será como los antivirus, las bóvedas cibernéticas y la criptografía.
En pocos años la computación cuántica hará la tarea de darle aún más capacidad a la IA, será cuando lleguemos a la Singularidad, o máquinas que puedan ser autónomas en la creación de más máquinas y programas. Podemos compartir la alegría y el entusiasmo de Sundar Pichai.
**Una máquina jamás decidirá tu voto, tienes que votar**