Argentina.- Tras darse a conocer material inédito de ‘Santa Evita’ la serie de Star+, para conmemorar los 70 años del fallecimiento de Eva Perón.
El detrás de escena de la serie, con Natalia Oreiro, Darío Grandinetti y el director Rodrigo García en la filmación incluyendo la conmovedora escena de los últimos momentos con vida de Eva Perón en su residencia.
Nuestra visión y principal objetivo es ofrecer, en todas nuestras propuestas de entretenimiento, los contenidos más relevantes. En este caso, estamos orgullosos de presentar el estreno de nuestra producción local Santa Evita, una serie de ficción basada en la novela de Tomás Eloy Martínez, centrada en una de las mujeres más emblemáticas de la política latinoamericana del siglo XX, e ícono de Argentina de trascendencia mundial”, comentó Diego Lerner, Presidente de The Walt Disney Company Latin America.
La serie cuenta con elenco internacional encabezado por Natalia Oreiro (Eva Perón), Ernesto Alterio (Coronel Moori Koenig) y Diego Velázquez (Mariano Vázquez), con la participación especial de Francesc Orella (Dr. Pedro Ara) y Darío Grandinetti como Juan Domingo Perón. Basada en el best seller homónimo del escritor argentino Tomás Eloy Martínez, “Santa Evita” cuenta con la producción ejecutiva de la actriz y productora mexicana Salma Hayek Pinault y José Tamez (ambos de la productora Ventanarosa) y con la dirección del realizador Rodrigo García, quien también se desempeña como productor ejecutivo, y del cineasta, actor, director teatral y guionista argentino Alejandro Maci, a cargo también de la producción artística. La serie fue escrita por Marcela Guerty y Pamela Rementería.
“Santa Evita” es la historia de un cuerpo sin tumba y de la leyenda que nació en torno de él. A lo largo de sus siete episodios de 45 minutos, narra la misteriosa historia detrás del cadáver errante de la primera dama argentina Eva Perón después de su muerte, el cual se mantuvo a la espera de ser enterrado durante tres años para la construcción de un mausoleo que nunca se concretó.
En 1955, las fuerzas militares de Argentina derrocaron al entonces presidente Juan Domingo Perón y ocultaron el cuerpo de Evita durante 16 años, con el fin de evitar que se convirtiera en un arma contra el régimen. Antes de su muerte, Eva se había convertido en una potente figura política como esposa del General Perón, y, su cadáver errante sin sepultura, influyó en la política del país durante más de dos décadas.