León, Guanajuato.- Pese a las torrenciales lluvias registradas en los últimos días, las principales presas de la entidad siguen con poca agua.
De acuerdo al último reporte de la Comisión Estatal del Agua en Guanajuato (CEAG) los principales embalses en la entidad se encuentran, en promedio, en un 40.86 % de su capacidad, cuando en el 2022 era de un 56.73 %.
Las reservas de aguas superficiales con las que se cuentan es de 693.98 millones de metros cúbicos al 5 de agosto; el año pasado para estas mismas fechas se tenían almacenadas 963.40 millones de metros cúbicos.
La presa más grande en Guanajuato es la de Solís, en Acámbaro, con capacidad para almacenar 800 millones de metros cúbicos y actualmente está a un 41.1 %; el año pasado estaba a un 71.2 %.
El Lago de Yuriria se está secando, pues va a un 16.7 % de su capacidad; la presa Allende a un 19.5 %; La Purísima a un 4.1 %.
Las represas y bordos han captado poca agua y prácticamente siguen secos.
La presa de El Palote se encuentra a un 15 % de su capacidad, según el reporte de Conagua, y no ha recibido escurrimientos de agua de la sierra de Lobos y de Comanja.
Un caso es la presa de Duarte, en León, que es prácticamente un charco de agua, por debajo del nivel de la base de la cortina.
“Desde hace cuatro meses se le dejó de sacar agua para el riego de huertos de aguacate y hortalizas; ya es puro lodo, y no se ha tenido escurrimiento de agua de la sierra de Lobos”, señaló el ejidatario Juan Manuel Zúñiga Esperanza.
Otra presa que está en la zona es la de La Laborcita, que permanece a su más bajo nivel de los últimos 10 años, señalan vecinos del lugar.
“Los animales pastan en el vaso de la presa que prácticamente está seco, con muy poca agua y hay áreas peligrosas, como arenas movedizas. Es un riesgo entrar a esas aguas”, dice León Soto Mendoza, agricultor.
En la dirección de Desarrollo Rural de León, se informó que en el Municipio se cuenta con alrededor de 1 mil 300 bordos, y estos no han captado agua, por lo que se espera que llueva este mes y septiembre.
AM