El Comité Ejecutivo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en Hidalgo, que encabeza Luis Enrique Morales Acosta, quien impulsa a su tesorero Julio Armando Mayorga como relevo, intimida a las y los docentes.

Integrantes del gremio magisterial de diversas regiones de la entidad acusan que, a través de algunos delegados, la actual dirigencia intimida a la base para que voten por su candidato en las elecciones del próximo viernes 15 de julio.

Los señalados manejan una “semaforización” con la intención del voto de cada docente, quienes son presionados para manifestar por cuál de las cuatro planillas existentes piensan sufragar y sobre ese “mapa” se aplican.

Y ante la posibilidad de que alguno de los profesores pueda expresar una intención del voto diferente a la que verdaderamente va a cruzar en la boleta, les advierten ya a todos que deberán tomarse una selfie dentro de la casilla. 

La dirigencia que encabeza Morales Acosta aplica ya el terrorismo sindical para que su candidato pueda ganar las elecciones. Mediante amenazas veladas manda decir que quienes se rehúsen pueden perder su plaza, lo cual es improbable.

A través de grupos de WhatsApp, las y los delegados que reproducen la dinámica del miedo comparten a los docentes mensajes de Julio Armando Mayorga y a su vez les piden que los difundan entre sus contactos “para así quedar bien”. 

Las y los maestros que no han querido propagar estos mensajes o que incluso han manifestado que votarán por Said Vargas Sáenz, Juan José Luna Mejía o Jesús Montaño Pastrana son señalados de inmediato ante la dirigencia.

Se supone que esta elección será por vez primera mediante el voto universal, libre, directo y secreto, pero aquí la primera violación a las garantías de las y los profesores, al indagar por quién votarán para colocarlos en su semáforo.

Esta persecución incluye la insistencia para que las y los maestros coloquen en el vidrio trasero de sus automóviles una calcomanía con la imagen de Julio Armando Mayorga y su planilla Naranja, llamada paradójicamente Somos Unidad.

La actual dirigencia solo tiene aceptación entre el magisterio de Ixmiquilpan, siempre favorecido, pero en el resto de la entidad existe el reproche hasta por el abandono que acusan durante la etapa más dura de la pandemia de COVID.

TERRORISMO SINDICAL

Luis Enrique Morales Acosta y su candidato Julio Armando Mayorga parecen ser ya víctimas de la desesperación. Buscan retener el control magisterial mediante la intimidación, más cuando su gestión nunca pudo consolidarse, pues cuando ganó hace cinco años muchos delegados corearon el nombre del entonces contendiente perdedor, Said Vargas Sáenz y siempre quedó la duda de lo que pudo ser, ahora encabeza la planilla Blanca (Transformación Sindical) y el viernes será la votación, donde ya se verá si este terrorismo da resultados o se revierte.

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