Uno de los fiascos del sexenio que está por terminar se llama Julio Manuel y se apellida Valera Piedras, una de las figuras de mayor influencia durante el mandato de Omar Fayad Meneses, incluso increpó a miembros del gabinete.

No obstante, a tres semanas de que asuma la presidencia rotativa de la Junta de Gobierno del Congreso del Estado de Hidalgo se le ha venido encima la pérdida de poder, ejemplo de ello es la intentona por querer relevarlo.

El pariente del gobernador Omar Fayad Meneses regresó a Hidalgo después de haber participado en el gobierno federal de la mano de Miguel Osorio con etiqueta de goleador, pero resultó tronco, digamos en términos futboleros.

Uno de los lastres que más daño causó a la imagen del también presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) fue Daniel Zárate Ramírez, quien lo utilizó como ariete y con intrigas lo echó a pelear a conveniencia.

Además, al imponer y sostener a este personaje como funcionario público, Julio Manuel permitió que incurriera en algún delito electoral, pues “lo asesora” en temas de partido, de la Cámara y hasta de campañas proselitistas.

Queda para el anecdotario sexenal la filtración atribuida a Daniel Zárate, aquel audio de la entonces candidata priista a la diputación federal por Huejutla en 2018, cuando perdió, y su exjefa en la SEPH, Sayonara Vargas Rodríguez.

Pero como el mal nunca muere o dicho menos dramático, como lo malo prevalece, el legislador local plurinominal y dirigente priista en Hidalgo se siente ya confiado ante el nuevo gobierno debido a su colaboración electoral.

Aferrarse a ambos cargos le permitirá continuar en la refriega política a través de negociaciones de bancada, que se anticipa serán a conveniencia de Morena, como lo demostró ya en las votaciones camerales del mes pasado.  

SE CAYÓ ARIANA ITZEL

Otra que cierra de capa caída el sexenio es la otrora mujer fuerte del Tribunal Superior de Justicia de Hidalgo, Ariana Itzel Duarte, quien desde la secretaría general ejerció más poder que las presidentas Blanca Sánchez y Yanet Herrera. Además de “cebarse” la magistratura que tanto presumió que tendría, a partir de mañana, 16 de agosto, despachará en el juzgado de Atotonilco El Grande, ese que nadie quiere porque hay que trabajar sin descanso, pues no hay guardias. Quien la sustituya en la secretaría dará pauta para la próxima presidencia.