***
¡Primero los pobres! aunque sea de atrás para adelante, así es el planteamiento de las sesudas mentes que organizan la feria de Pachuca, donde de manera inédita se les ocurrió seccionar el teatro del pueblo y ponerle cifras estratosféricas al área VIP, ¿pues no que muera el clasismo? Y bueno, como había que pagar hasta 2 mil 943.98 pesos por persona y a nadie le interesó, mejor recularon.
***
Ahora no salgan con que así se los dejaron o que desmantelado y abandonado, bueno, esperen, sí lo hicieron, pues en su afán de justificar que le pusieron precio al teatro del pueblo dijeron que era para captar recursos y remozar el recinto. ¿No saben que este tipo de espacios sirve a quienes no pueden pagar un acceso al palenque y si llegan temprano hasta disfrutar en primera fila?
***
Bien dicen que no hagas cosas buenas que parezcan malas, como tratar de sacar dinero a costa de las presentaciones del teatro del pueblo, acción con la que no solo perjudicaron a quienes confiaron electoralmente en Morena y sintieron la primera puñalada, también a cantantes como Fey, quien pidió al público que se acercara, pues a ningún artista le beneficia una foto con el frente vacío.
***
Como Pedro por su casa, así anda el exgobernador de Hidalgo Omar Fayad en el palenque de la feria de Pachuca, como dijeran los quisquillosos, eso de la férrea fiscalización parece pan y circo. Por cierto, el encargado de la PGJEH, Santiago Nieto, es ajonjolí de todos los moles, pues desde acá también dice perseguir al exgobernador tamaulipeco Francisco García Cabeza de Vaca.
***
Algunos convidados aseguran que el eterno director de Educación Normal, Taurino Ramírez Labra, organizó tremendo festín en casa de sus papás y que fue financiado con la morralla que sobró de los pagos por concepto de exámenes de admisión que miles de aspirantes tuvieron que devengar. La tertulia estuvo amenizada por grupos musicales pagados con recursos del nivel.
Los comentarios expresados en esta columna de opinión no son una información noticiosa o necesariamente verídica. Forman parte de los dichos, trascendidos o comentarios.