El paso de Francisco Santander Pérez por la subprocuraduría de Procedimientos Penales región oriente quedará marcado, dijeran en términos de presunción de inocencia, por hechos probablemente constitutivos de corrupción.
Uno de los más escandalosos está relacionado con una empresa distribuidora de medicamentos, donde los socios entraron en concflicto y uno de ellos fue favorecido por la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJEH).
El viernes 1 de octubre de 2021 arribó al cargo en sustitución de Víctor Ariel Pérez Benítez, el procurador era entonces Alejandro Habib Nicolás, y de inmediato tomó casos por encargo, principalmente los que tenían implicación personal.
Utilizó los recursos del Estado para torcer la ley, como ordenar un peliculezco cateo a la bodega de la empresa distribuidora, ubicada en las inmediaciones del parque industrial Canacintra, para atemorizar y salirse con la suya.
Dicho cateo fue para sustraer libros de administración, un asunto mercantil que forzaron en penal bajo el supuesto de administración fraudulenta, apoyados con documentos elaborados en la notaría 22 de Pachuca, que son ya indagados.
La característica de su gestion fue “vender” este tipo de asuntos y el cierre de sus corruptelas ocurrió sin falla alguna entre alegres choques de vasos, momentos en los que también le daba por hablar de más y alardear sus logros.
El dinero fue siempre el motor de sus acciones, de las cuales tendría que ser llamado a cuentas por la administración provisional de la PGJEH, aunque él asegure que prácticamente ya huyó a la defensoría de oficio federal.
En este entramado hacía falta integrar un abogado, fue así como se sumó Adrián Vargas González como representante legal del socio que por amiguismo fue favorecido por la institución que debería procurar la justicia.
En cuanto a este abogado, coincide el litigio esbozado con algunas llamativas adquisiones, como un Mini John Cooper Works, bajo la premisa que el amor y el dinero no se pueden ocultar, solo falta ver si tendrá alguna repercusión.
Por lo pronto, existe una carpeta de investigación contra el litigante por todo este asunto, así como una más por la documentación elaborada en la citada notaría, donde aparece como titular Alejandro Habib y como adscrito José Habib.
RELEVOS, JUNTO CON PEGADO
En más de la PGJEH, el lugar de Francisco Santander, como subprocurador de Procedimientos Penales región oriente, será para un sobrino de José Guadarrama de nombre Caleb, interpretado como pago de cuota, mientras que la vacante que dejó Sissi Anette Rodríguez en subprocuradoría de Procedimientos Penales región poniente será para Julia Granados, sobre quien pesa una recomendación de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH), cuando fue funcionaria de la Secretaría de Seguridad Pública de Pachuca, y aún así comenzó ya a repartir gritos entre el personal al que advierte tener la confianza “del doctor”.
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo