Hoy, como nunca antes, he visto un estruendoso furor por la temporada de Halloween. Las redes sociales están inundadas de publicaciones sobre el tema. La venta de artículos temáticos está en pleno auge. Los productos: vasos, tazas, disfraces, adornos y un infinito etcétera, se ofrecen a todos los segmentos de consumidores.

En el caso de del cine, de las películas alusivas a esta festividad, nunca había observado tan abundante promoción para consumir películas de terror. Esto, debe en gran medida, a la muy amplia oferta de plataformas de streaming, que desde luego cuentan con grandes catálogos con películas del género.

Hasta no hace mucho tiempo, este furor por el Halloween cinematográfico, solía llegar hacia finales del mes de octubre. Ahora, la mercadotecnia dicta que este mes, es dedicado a una especia de fiesta del terror en las pantallas.

Cierto es que desde los años setenta, gran parte de las producciones cinematográficas dedicadas al horror y al terror, se estrenaban a principios de del mes octubre, es decir, un mes antes de la celebración de la noche de brujas. La gran diferencia estriba en que hace 50 años, eran muy pocos títulos de estos géneros los que se estrenaban anualmente.

En nuestros días, lo que proponen las plataformas de streaming es hacer un maratón dedicado al Halloween. Las opciones para ver sobran. El género terrorífico se diversificado, quizá, como ningún otro. Desde el terror supernatural, el gore, el cine slasher, la moda del J-horror (horror japonés), o el k-horror (horror koreano); y muchos derivados más, mismos que llenan de títulos las propuestas hacia el espectador.

Algunos clásicos del cine de terror se convirtieron en exitosas sagas, que, hasta el día de hoy, siguen generando jugosas ganancias a los grandes estudios que las producen. Aunque, algunos títulos, como Masacre en Texas, presentan la misma historia una y otra vez. Mismo caso de la saga Halloween, que ya espera el estreno de su más reciente película.

George Méliès, uno de los padres de la narrativa cinematográfica, no solo fundó el género de ciencia ficción con la película Viaje a la Luna, producida en 1902; antes, en 1896, estrenó un cortometraje de solo cuatro minutos de duración, titulado La mansión del diablo. Con ese corto, se iniciaría una gran industria dedicada al cine de terror, misma que hoy encuentra su auge también en las series ofrecidas en streaming.

¿Qué ver en esta temporada? Yo elijo títulos clásicos, de esos que ya no provocan pesadillas. De lo nuevo, poco bueno, aunque con sus honrosas excepciones. Pero sigo prefiriendo los títulos de antaño. Ustedes ¿qué verán en este furor por el Halloween?

ACLARACIÓN       
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo

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