Asteriscos – Hidalgo

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En la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim) se preguntan si el nuevo gobierno dejará irse, así como así, al exdirector Abraham Rublúo Parra, pues las y los trabajadores afirman que se llevó hasta las ligas. Por cierto, hasta el último día de su gestión ingresó a sus amigos a la nómina y a los que ya tenía ahí los sindicalizó, con apenas un año de antigüedad. 

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Como dijeran algunos: ternurita. A todos los funcionarios municipales de Pachuca los pusieron a presumir en sus redes sociales y aplicaciones de mensajería móvil que el alcalde Sergio Baños ocupa el lugar 21 entre los cien mejor evaluados del país, según Arias Consultores. Vergüenza había de darles, pues además de lo dudoso del estudio, aparece con solo 43.3 por ciento de aprobación.  

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Vaya sorpresa la que generó el regreso de Francisco Lugo a la Secretaría de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial de Hidalgo, pero ahora como director general de Infraestructura, pues cuando estuvo en administraciones priistas desvió recursos, pidió moches y fue despedido por corrupto, aunque encontró cobijo con el entonces contralor César Mora, uno de los más investigados hoy en día. 

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Resultó por demás paradójico ver al alcalde de Epazoyucan, Fidel Arce, en la ceremonia inaugural de la Semana de la Transparencia, pues además de acoso sexual y sustracción de menores, es señalado de participar en la presunta estafa municipal emanada de la operación 70/30, que la actual administración estatal todavía busca ponerle nombre y no se decide si dejarle “estafa siniestra”.

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Pues no fueron 200, pero sí 33 los teléfonos móviles identificados como robados en la feria que tristemente no late, la San Francisco Pachuca Hidalgo 2022, donde las y los asistentes fueron víctimas, como dijeran los clásicos, de los amantes de lo ajeno, provenientes de la Ciudad de México, quienes encuentran en Hidalgo mejores condiciones para delinquir. Ni modo, venga otra maroma.