Pulquerías y cantinas antiguas de Tulancingo

Entre el veneno y el remedio la principal diferencia es la dosis, es una frase atribuida a Paracelso y aplica para iniciar este artículo que no pretende ser una incitación al alcoholismo ni a algunas prácticas alrededor de las cantinas y pulquerías, solo es un humilde recuento de algunos de esos locales en los últimos 50 años.
Desde la época prehispánica, el pulque está íntimamente relacionado con la zona, ya que en todo el valle es muy común encontrar raspadores de maguey, elaborados con obsidiana.
En nuestra ciudad existió un reglamento en el cuál se prohibió poner pulquerías y cantinas en el centro, según dicho bando, sólo podían existir a 50 metros de distancia de la calle 21 de marzo, por ello en la calle circular (Hoy Allende, E. Chavarri y Av. del Trabajo) proliferaron este tipo de establecimientos.
Hace unas décadas había en la ciudad muchas pulquerías, hoy sobreviven: La sala de espera (con otro concepto) y el Palmar. Hasta hace pocos años: La Playa, la Jarochita, la Perla del Brasil. En 1917 el litro de pulque costaba 5 centavos.
Para beber el pulque se usaban contenedores de vidrio de diferentes tamaños, según la cantidad que se quería tomar, estaban las “macetas” (2 litros), los “cañones” (1 lt.), los “chivitos” (1/2 lt.), las “catrinas” (de forma de taza), los “tornillos” (tarros de vidrio medianos) y los jarros de barro. 
Se jugaba la rayuela, el cubilete porque estaba prohibidos los juegos de cartas y se sustituyó. Había prohibición de que entraran mujeres y niños y a veces el hombre entraba al establecimiento a pedir una bebida para su acompañante mujer y esta la bebía en la vía pública.
Hace unos 50 años, en esta ciudad había tendajones, piqueras, cantinas y pulquerías con nombres curiosos. 
El brinco del coyote, El rey que rabió, Las musas, El Tenampa, El toro embolado, El Gran combate, Las Dalias, El último trago, La copa del olvido, Las 3 carabelas, El Paso del Río Bravo, El Canalito, La Perla del Brasil, La Reyna Xochitl, La Playa, el Gato negro, el Palmar, las quince letras, la India bonita, la Superior, la Jarochita, las moscas. los papelitos, el aguacate, sal si puedes, el atorón, la oficina, La Chispa eléctrica, la Zorrita, la puerta del sol, El Gallito del Norte,  La Línea de Fuego, La Sirenita, La Venadita,  La Cubana, La Flor De un Día, La Rosa de Oro, el cerro azul, La Peña taurina y la Zulema.

Y MUCHOS OTROS CON NOMBRES MUY INGENIOSOS
¿Recuerdan otros?
•    Gracias por la contribución a este artículo a Abraham Ascencio