De septiembre de 2022 a febrero de este año, la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH) registró 235 reportes de violencia dentro de las escuelas.
El titular de la SEPH, Natividad Castrejón Valdez, informó que los casos con más reportes son violencia física con 80, sexual con 51, y psicológica con 43.
Además, en esos seis meses también se reportaron 25 casos de violencia verbal, 16 de violencia cibernética, y seis de exclusión; todos en nivel básico.
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PROTOCOLO CERO
Explicó que los casos registrados derivan del Protocolo Cero, que es un manual de cómo los directores, maestros o supervisores deben actuar ante la presunción de violencia de cualquier tipo.
Aclaró que de los casos reportados de violencia física y sexual no todos sucedieron dentro de las escuelas, sino que en el plantel detectan que el niño o niña recibió agresión, incluso desde su hogar.
Por lo que se tiene que activar el protocolo en las escuelas, abrir un expediente en todos los casos y hacer un procedimiento interno.
DENUNCIAS EN MINISTERIO PÚBLICO
Castrejón Valdez indicó que tanto en violencia sexual como física, el jurídico de la SEPH inmediatamente tiene que ver cuándo debe acudir al Ministerio Público
“Todo lo que tiene que ver con sexual se va inmediatamente al Ministerio Público para que ellos hagan su propia investigación, pero se está actuando de manera rápida”, mencionó.
Detalló que los 235 casos de violencia son de primarias y secundarias, ya que nivel medio superior y en las universidades tienen su propia dinámica y protocolo.
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MÁS REPORTES EN METRÓPOLIS
El secretario de Educación Pública precisó que donde más han reportado casos de violencia en las escuelas es en las zonas metropolitanas del estado.
“No es porque sólo pase ahí, hay mucha violencia en todo el estado, pero por desgracia hay regiones como la Otomí-Tepehua, la Huasteca, donde está tan normalizada la violencia que ni siquiera la reportan”, comentó.
Debido a ello, realizan visitas en las regiones para dar a conocer y socializar el protocolo, y ofrecen talleres para que puedan reconocer los directivos y reporten rápidamente casos de violencia.
ESTUDIANTES AGRESORES
Precisó que hay un protocolo para rápidamente proteger a niñas y niños víctimas de violencia, así como a niños y adolescentes que han violentado.
“Cuando es un agresor un niño o un adolescente se guarda su identidad porque así lo marca la ley, pero se le cambia de escuela”, indicó.
Además, agregó, que se establece un compromiso firmado con los tutores para que el menor de edad tome terapia, entre en un proceso de trabajo emocional y se garantice que no se volverá a repetir la agresión.