Irapuato, Guanajuato.- El obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, señaló que en México tenemos que reconocer que los migrantes son discriminados, maltratados y se abusa mucho de ellos, a pesar de que pareciera que las leyes están bien.
“Se va teniendo que reconocer con mucho dolor que se abusa y se explota a los más pobres, esta es una realidad no solo de nuestra patria, sino de todo el mundo”, exclamó durante su mensaje dominical.
Se va teniendo que reconocer con mucho dolor que se abusa y se explota a los más pobres”.
Esto tras los hechos registrados en los últimos días, cuando se denunció la desaparición de 23 personas desde el pasado 4 de abril que habían salido de Guanajuato, y posteriormente fueron localizadas con vida en San Luis Potosí.
Un caso confuso
Díaz Díaz señaló que es un caso muy confuso en el cual la cifra de migrantes secuestrados aumentó, pues ya van más de 100 rescatados.
“Las noticias han estado muy confusas porque han estado dando cada día diferentes cifras, pero lo preocupante es el abuso que se hace de los migrantes, y de cómo a quienes están ya de por sí maltratados, ya de por sí en situaciones deplorables, cómo se les explota todavía más y cómo se hace una trata de migrantes”, dijo.
Explicó que gente cercana a él, le comentaba que quizá los migrantes dejan más dinero que el tráfico de drogas u otras actividades que hace el crimen organizado.
“Y es explotar al más pobre y sacarle dinero al más pobre. Indudablemente que ha sido con mucha confusión la noticia (la desaparición de los 23) desde el primer día y que esto ha abierto muchas situaciones irregulares que hay, dicen en nuestro estado, dicen en San Luis, dicen en diferentes lados, pero que a veces se va teniendo que reconocer con mucho dolor”, señaló.
El Obispo de Irapuato señaló que este caso ha puesto a México en la mira, y espera que se esclarezca y se llegue al fondo de todo esto que hay, porque hasta ahorita ha habido más confusión que certezas.
Exhibe denuncia ruta de secuestros en SLP; operan en Matehuala ‘Los Alemanes’
De no ser por la denuncia de un empresario transportista, las autoridades potosinas no habrían admitido la existencia de una zona controlada por el crimen donde se plagia y extorsiona masivamente a migrantes y pobladores.
Lo que era una búsqueda de 23 personas que viajaban en transportes turísticos arrendados en Guanajuato, abrió la cloaca y en menos de 48 horas aparecieron 121 víctimas del crimen organizado en Matehuala, San Luis Potosí.
CA