España.- Borja Escalona es un influencer español que se viralizó últimamente no por sus contenidos en YouTube, sino porque intentó desprestigiar a un restaurante que no le dio comida gratis, pero su jugada le salió contraproducente.
Según reforma, Escalona acudió al restaurante “A Tapa do Barril”, en Vigo, España, donde intentó no pagar una empanada que costaba 2 euros (más de 40 pesos).
La trabajadora le insistió en que debía pagar su consumo, pero el influencer aprovechando sus 36 mil seguidores, amagó al establecimiento con cobrarle la “promoción”, que costaba 2 mil 500 euros (más de 50 mil pesos).
“¿Te tengo que pagar? Pues entonces te tengo que cobrar yo esta promoción que te acabo de hacer. Te va a salir un pelín más caro”, señaló el youtuber español, pues supuestamente solamente comía cosas gratis.
El joven es originario de Sevilla, pero reside en Madrid y desde 2016 abrió su canal de YouTube. Su contenido regularmente era polémico, pues se dedicaba a criticar a regiones o habitantes de otras regiones.
Afecta Borja Escalona a restaurante en sus reseñas
Inicialmente, en el perfil de Google del restaurante “A Tapa do Barril”, seguidores del influencer consiguieron colocar reseñas negativas y ataques a la trabajadora.
El restaurante tuvo que reaccionar con un comunicado explicando lo que sucedió.
“Cobrar por nuestro trabajo y no pasar por el aro de esta persona, ha supuesto decenas de puntuaciones negativas en nuestro perfil de Google (personas que nunca han comido ni una de nuestras empanadillas) y llamadas a nuestro negocio insultando a nuestro equipo”, señaló.
Tras la queja del restaurante, el influencer fue castigado tanto por YouTube como por otros negocios que le negaron el acceso.
YouTube desapareció el canal de Borja Escalona argumentando “una infracción de las condiciones del servicio”.
Mientras que un bar en Madrid le negó el acceso al influencer, el propio Escalona tuvo que ofrecer disculpas a la empleada de “A Tapa do Barril”.
Sobre el bar en Madrid aseguró que el gerente le dijo que no quería personas indeseables en su establecimiento, asimismo el gimnasio donde acudió ya no lo recibió.
“A todo aquel que se haya sentido ofendido, a España en general, sobre todo a la gente de ‘A Tapa do Barril’, os quiero pedir perdón, un perdón claro, sincero y transparente”, expresó entre sollozos.
Finalmente, aseguró que tuvo que cerrar sus cuentas sociales, como Twitter, por las críticas que recibió de otros usuarios.
HLL