Ciudad de México.- “No hay otra opción”, aseguró el embajador de Colombia Álvaro Moisés Ninco Daza en la lucha contra el narcotráfico, por lo que propone a México dialogar con los cárteles.
Desde Morelia, Michoacán, uno de los estados más golpeados por la delincuencia organizada, a donde acudió el embajador colombiano a un evento, la prensa lo cuestionó sobre las acciones que se debe tomar para enfrentar a los cárteles.
“No hay otra opción”, respondió. “Tenemos problemas que ponen en riesgo la existencia de la humanidad, la crisis climática, la guerra y el narcotráfico y la criminalidad, solamente expone más a la humanidad”.
Una reportera le cuestionó si dialogar con los criminales no significa “tirar la toalla” y someterse a los intereses de estos grupos.
“Colombia viene de tirar la toalla y someterse a esos grupos a través de gobiernos que coadyuvaron al narcoestado, México también, y no lo digo yo, sino una sentencia en el tribunal de Nueva York, nosotros estamos cambiando eso”, señaló en referencia al juicio contra Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública en el sexenio calderonista.
El actual gobierno del presidente colombiano Gustavo Petro se ha propuesto disminuir la violencia en el país mediante diálogos de paz con múltiples grupos armados o con propuestas para someterlos a la justicia.
Sin embargo, hasta el momento ha logrado reiniciar una mesa de diálogos con la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN) y anunció el inicio de otro proceso con el Estado Mayor Central, una facción de las disidencias de la extinta guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que no se acogió al acuerdo de paz firmado en 2016 con el Estado.
Además suspendió el cese al fuego bilateral contra el Clan del Golfo, considerado el cártel de drogas más peligroso del país, luego de una tregua que había desde el 1 de enero de este año. Este grupo criminal es señalado de estar involucrado en la minería ilegal y de presionar a cientos de mineros informales a protestar contra el gobierno.
En México, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha repetido que una de sus estrategias es atacar las causas y “abrazos, no balazos” con los grupos criminales, aunque ha negado que haya una tregua con los cárteles o una inacción para combatirlos, como legisladores estadounidenses han acusado recientemente.
HLL