“Un mal político engaña a sus electores; uno bueno, a la historia.”
Roberto Martínez Guzmán
1.- El cuento de que Alejandro Moreno es una “víctima del sistema” no se lo traga nadie más que los anquilosados opositores, viejos cartuchos quemados que parecen condenados a seguir rumiando fracasos en una realidad que ya ni siquiera alcanzan a comprender. Moreno le ha costado a la Alianza PRI-PAN-PRD unos 5 puntos, colocándola a unos 15 puntos promedio de cualquier corcholata oficialista. A ese paso, en unos años no gobernarán ni los comités vecinales de las zonas fifí.
2.- Queda claro que Moreno es un lastre y queda claro, también, que no puede ser removido, es el dueño del PRI.
Lo que no queda claro a muchos panistas de a pie es la razón por la cual Marko Cortés se ha empequeñecido tanto frente a un grotesco ser como Alejandro Moreno. Si bien Cortés nunca fue sinónimo de altura de miras, sorprende el papel rastrero que ocupa hoy y que ya levanta ámpula entre el panismo no solo de a pie sino del que ya detenta poder. No dude que en algunos meses, menos de un año, estalle un real cisma azul de la mano de gobernadores que cuestionan la alianza, como Mauricio Kuri, o de legisladores con pesos propios como Gustavo Madero o Xóchitl Gálvez.
3.- El PRD juega de forma patética a intentar jugar, su liderazgo está rebasado, Jesús Zambrano, otrora rebelde guerrillero de la Liga 23 de Septiembre, hoy se percibe cansado, vencido, como obligado por las circunstancias a hacer lo que no quiere hacer, ya parece que ni él mismo cree en sus palabras.
Mientras tanto, el club de Toby perredista, impide avanzar a jóvenes y disruptivos cuadros como el de Ángel Ávila, que ha hecho mella a la 4T con sus denuncias electorales, pero que condenan a la banca. Triste final para el partido que hace un par de décadas era sinónimo de rebeldía y esperanza.
4.- Dante Delgado avanza firme con su Movimiento Ciudadano, aunque con menos fuerza al 2024 y con más al 2030 que quizá a él ya no le tocará ver, MC es bueno para las campañas y bastante malo para los gobiernos, pero al menos promete, se va haciendo más fuerte y su peso de negociación mucho más oneroso. Estemos atentos al papel de Juan Zepeda para el próximo año en el Estado de México, puede dar sorpresas… Es decir, no que pueda ganar, pero sí puede dar sorpresas, ¿fiel de la balanza?
5.- Morena y sus rémoras se encaminan a una batalla de arrancarse los ojos. Mario Delgado no controla nada en concreto, las corcholatas vapulean al INE y al TEPJF todos los días, a eso súmele que liderazgos que hoy se sienten “secundarios”, como el de Horacio Duarte y aliados, preparan fuerzas en la noche de cuchillos largos que será la elección del Estado de México donde Delfina Gómez lleva, claramente, la delantera. Rodarán muchas cabezas.
6.- El gobierno se parece cada día más a una chocante caricatura del PRIato más rancio, el Presidente pierde cualquier respeto a la investidura y lo mismo hace el ridículo en la Casa Blanca que en su mañanera musical con Chico Che. Bueno, hace el ridículo para los que no lo apoyamos, pero para casi el 60% de la población es un tipo que cae bien o que, al menos, cae mucho mejor que los otros.
De Colofón
Mientras que claramente en Morena será Delfina Gómez la candidata al Estado de México, en la “Alianza” no se ponen de acuerdo ni Alejandra del Moral ni Ana Lilia Herrera ni Enrique Vargas… Incluso, hasta esperan la “aprobación” de Peña Nieto. ¿Quiere un chiste?, según ellos a Del Mazo le importa ¡su legado histórico!, jajajaja.
Y todavía faltan 801 días para que termine el sexenio.
@LuisCardenasMX