PARECE que cada vez que Andrés Manuel López Obrador quiere hacer su muy presidencial voluntad y saltarse las trancas legales, recurre al argumento de declarar las cosas como “de seguridad nacional”.
LO HIZO para blindar la construcción del AIFA y la refinería de Dos Bocas y lo repitió hace unos días para imponer la continuidad de las obras del Tren Maya aun en contra de fallos judiciales.
Y AYER se sacó de la manga el mismo recurso en el tema de la sequía en Nuevo León para obligar a que quienes tienen concesiones otorgadas por la Conagua entreguen el líquido al son que les toquen desde Palacio Nacional.
PÉSIMA señal para los ya de por sí acalambrados inversionistas nacionales y extranjeros que están viendo cómo el gobierno les puede cambiar la jugada en cualquier sector, de un día para otro y sin decir ni ¡agua va!
RESULTA muy curioso, por decir lo menos, el diferente rasero que se aplica en el SAT, que encabeza Raquel Buenrostro, para cobrar multas y créditos fiscales a empresas.
A LA constructora brasileña Odebrecht, cuyos ejecutivos confesaron haber sobornado a funcionarios mexicanos, le avisaron que ya no les van a cobrar una multa por más de mil millones de pesos porque así lo dispuso un tribunal y ni modo.
EN CAMBIO, a la compañía mexicana Alsea le quieren cobrar dos veces por una operación de compra de restaurantes a Walmart que se concretó en 2014 y por la que, aseguran, ya se pagaron los impuestos correspondientes. Bien raro, de verdad.
VAYA PAPELÓN hizo el jueves la subsecretaria de la SRE Carmen Moreno Toscano en una recepción a la que convocó la embajada de Polonia en México con motivo de la visita del viceministro de Relaciones Exteriores, Marcin Przydacz.
MIENTRAS el diplomático polaco dijo que no hay tema más relevante que la invasión de Rusia a Ucrania, la mexicana ni mencionó el conflicto y se lanzó a hablar de la importancia de ampliar las relaciones comerciales entre ambos países.
TODO INDICA que en el equipo de la Cancillería tienen otros datos y otras prioridades. ¿Dónde será el siguiente mitin de Marcelo?
UNA BUENA: las utilidades de Pemex subieron 800% por el alto costo del petróleo a nivel internacional.
UNA MALA: ese dinero se está usando para subsidiar las gasolinas, un gasto que ya supera los 31 mil millones de pesos.
UNA PEOR: dicen en la SHCP que no pasa nada, al cabo que para eso tienen 160 mil millones de pesos de ingresos excedentes para mantener la promesa presidencial de que no habrá “gasolinazos”. Total, como a la 4T le sobra el dinero, se da el gusto de subsidiar el calentamiento global y la contaminación.