Un cuento es una narración breve de ficción… El que voy a compartir parece cuento, pero es una historia real (parte II).
R- Guau, mi Santias, leí con atención tu artículo dominical sobre Bukele (parte I) y lo que más llamó mi perruna atención, fue la determinación del hoy Presidente de El Salvador, para, contra todo, partidos de oposición, jueces y magistrados, tribunal electoral, prensa controlada e incluso el partido que lo llevó a ser alcalde de Cuscatlán, primero y de la capital, San Salvador, después, El FMLN, que lo expulsó de sus filas por no doblegarse a sus instrucciones y señalar corruptelas, contrarreloj se lanzó al precipicio para formar un partido nuevo y hacer alianzas con los marginados de siempre y así arrasar en las elecciones presidenciales del 2019.
S- En la primera parte narramos su antecedentes y su lucha política, en esta segunda parte, describiré lo que en mi opinión es su determinación por rescatar a El Salvador de las pandillas Maras (crimen organizado) y por liberarse del dominio de las naciones colonialistas, empezando por USA y la Unión Europea, para hacer de El Salvador una nación soberana de ciudadanos libres que construyen su destino y controlan sus recursos naturales.
R- ¡Guau!, eso estuvo bien, mi Santias, también me impresionó la forma en que conectó con la gente a través de un discurso respaldado por acciones, para quienes no te leyeron vuelvo a citar de la página web de oposición revistaelementos.net: “Los Bukele supieron leer el escenario del momento: indignación y hartazgo, en todo el mundo, con la política tradicional. «La gente está desencantada del sistema político. A la gran mayoría no le interesa ni un partido ni el otro. Lo que le interesa es que haya políticos honestos. Pero ya nadie cree que existen. Ojalá nosotros podamos cambiar eso», manifestó (Nayib), el 17 de abril del 2012, en la entrevista Frente a Frente.”
S- Pasemos a comentar, mi Rufo, ¿qué ha pasado en El Salvador con Nayib Bukele como presidente?: Durante los primeros tres años de su mandato, todo fue remar contracorriente, Nayib Bukele fue obstaculizado presupuestal y jurídicamente al tener en la Asamblea Legislativa a una mayoría opositora;… pero, en el 2021 su partido Nuevas Ideas y sus aliados arrasaron con la oposición obteniendo 61 de los 86 escaños de la Asamblea Legislativa, ¡una mayoría histórica! que les permitió hacer hasta cambios constitucionales sin el apoyo de opositores; así empieza el milagro y el enfrentamiento con la oligarquía y los países colonialistas.
Cito de Human Rights Watch (hrw.org): (Washington D.C.) – “…El 1 de mayo, pocas horas después de que se integrara la nueva Asamblea, con miembros leales a Bukele, los legisladores destituyeron y reemplazaron a todos los jueces de la Sala de lo Constitucional, así como al Fiscal General. Los jueces fueron removidos simplemente porque al gobierno le disgustaban sus sentencias, lo cual viola estándares internacionales sobre independencia judicial.” Interesante el fraseo, no habla de ilegalidad ni del interés salvadoreño, ni de que la mayoría se la dio el pueblo, habla de “estándares internacionales” una linda forma de querer controlar e intervenir y ojo, el comunicado está publicado en Washington, no en El Salvador, en una clara muestra de injerencia que llevó a Bukele a enfrentar y poner en su lugar a todos los representantes de naciones que hablaban de un intento de golpe de Estado; Bukele simplemente argumentó: “Nuestras leyes lo permiten, queremos ser como Uds. pero, para lograrlo debemos hacer lo que Uds. hacen, no lo que Uds. nos dicen que hagamos.” Y los mandó al carajo, incluido USA.
El siguiente reto fue enfrentar al crimen organizado, para ello logró se decretara un “Estado de Excepción” que hace a un lado a organismos internacionales de Derechos Humanos y permite e la policía y al ejército el luchar con libertad y flexibilidad priorizando la seguridad ciudadana sobre los “derechos de los delincuentes”. Sobre ello, El Faro, un medio crítico y opositor al gobierno (Bukele – dixit), publicó lo que en sí parece contradictorio, lo cito: ElFaro.net: “Ahora El Salvador ha entregado el poder a una sola persona, que ya manipula todo el sistema y que no está sujeto ni a mecanismos de control ni de rendición de cuentas. Si en una democracia el pueblo delega en sus representantes el gobierno y les exige que rindan cuentas de sus actos, en el régimen autoritario que vivimos ahora es el gobernante quien decide qué hacer y qué decirnos.” Sin duda es una crítica directa a la gestión gubernamental y legislativa, pero, en contra parte señala que los salvadoreños están a toda madre y felices, vuelvo a citar: “Las escenas atestiguadas en las últimas semanas por los reporteros de este periódico dan cuenta de una nueva vida, desconocida hasta ahora para miles, en la que pueden cruzar calles y convivir con vecinos y seguir con sus vidas sin el sometimiento provocado por la pistola en la cabeza que colocaron los pandilleros por décadas. Esto, sin duda, es un cambio extraordinario.” Sobre ello el pueblo también opina y le da a Bukele más del 90% de aprobación poniéndolo en el número uno a nivel mundial, mientras ya están presos aproximadamente 60,000 Maras.
R- Guauuu, mi Santias, me gustaría cerrar esta colaboración, citando el contraste que encontraste entre el presidente Nayib Bukele y AMLO en el 2021, te cito: “S- …En mi opinión hay una distancia del cielo a la tierra, me explico: Bukele ama a su país, AMLO se ama a El mismo. Bukele combate a la delincuencia, AMLO les da abrazos y los libera cuando los apresados son sus cuates. Bukele enfrenta al establishment americano, AMLO se puso de tapete de Trump. Bukele respeta el orden constitucional, AMLO lo violenta y prostituye. Bukele se rodea de gente capaz, AMLO se rodea de adoradores serviles e ineficientes”…
S- … ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión.
Santiago Heyser Beltrán
Escritor y soñador