Creo que estas últimas semanas se nos han dado varias muestras de que el mal ejemplo, se contagia.
Desde que tomó posesión del cargo, nuestro señor Presidente, anda buscando de una forma o de otra, cómo cambiar nuestra Carta Magna, (y si no, manipularla, como en el caso del INAI), para que sirva a sus objetivos. Su último intento, pone en riesgo todo tipo de inversión, tanto extranjera como nacional.
Le han llamado la “Ley exorbitante”, (aunque bien podría decirse “arbitraria” como dice Sergio Sarmiento) porque ahora quiere López, poder decidir en cualquier momento por cualquier circunstancia que se considere “pone en peligro el interés público”, reincidir cualquier tipo de contrato que se tenga con el gobierno.
¿Qué es el “interés público”? ¿Adivinen, estimados lectores quién lo decide? ¡Pues el mismo gobierno!, ¿quién va a querer hacer contratos así? Nadie en su sano juicio… ¡solo aquellos que sepan cómo comprar la decisión del que mande!.
Y como el mal ejemplo puede cundir, pues ahora nuestra Cámara de Diputados, decidió poner una ley en contra de la del TEPJF, es decir, Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. ¿Qué hace este organismo para que le quieran acotar su poder? “El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación es un órgano especializado del Poder Judicial de la Federación, (cómo puse en un artículo anterior, éste es uno de los 3 Poderes que conforman nuestra Democracia) encargado de resolver controversias en materia electoral, proteger los derechos político-electorales de las y los ciudadanos e impartir justicia en el ámbito electoral” según la página web del Gobierno de México. “Es la máxima autoridad jurisdiccional en materia electoral, y tiene la competencia para resolver, en forma definitiva e inatacable, los diferentes tipos de controversias electorales, entre ellos, las impugnaciones de las elecciones así como, la determinación e imposición de sanciones por parte del INE, a partidos, agrupaciones y personas físicas o morales”, según Wikipedia.
Y esto último, al parecer, fue lo que motivó a l@s Diputad@s a tratar de quitarle su poder. ¿Qué sanciones “famosas” ha hecho la TEPJF? Este Tribunal fue el que determinó en 2006, a petición de López Obrador y su coalición, recontar el 9% de las casillas. También fue el que no aceptó la impugnación de la misma coalición en 2012. Fue el que en 2015, multó al PVEM, y declaró nulas las elección municipal de Tabasco y de gubernatura de Colima, por demasiadas irregularidades, en ese mismo año.
¡Claro que es una “piedrita (o piedrota, diría yo) en el zapato” para aquellos que no les gusta cumplir la ley! Ya estábamos acostumbrados a que lo hiciera Morena, ¿pero ahora todos los otros partidos?. Gracias a la presión de los medios de comunicación, a varios expertos y a las redes sociales, se echaron para atrás… pero da miedo pensar que ahora todos quieren estar “por encima de la ley”. No dándose cuenta que es la Ley la que nos mantiene civilizados y democráticos.
¡Sigamos manifestando nuestro descontento por aquellas cosas del Gobierno que no nos parecen! Ellos son nuestros empleados, deberían estar a nuestro servicio y por el bien de México… no por el personal. ¡NADIE por encima de la Ley!