LO QUE pasó en el Senado es el mejor ejemplo de que los políticos están completamente alejados de la realidad de la gente. Las y los senadores de Morena, PT y Partido Verde viven en una burbuja de ilusión, por no decir en una borrachera de poder.

PORQUE lo que hicieron estos legisladores no lo podría hacer ninguna persona con un trabajo normal, en el que tiene que asumir responsabilidades, cumplir resultados y, si acaso, enfrentar consecuencias. ¿Se imagina que el contador de la empresa en la usted trabaja no revisara las cuentas y presentara una declaración en ceros a ciegas? Las y los senadores de la 4T aprobaron ¡20 reformas! sin siquiera haberlas leído. Así como las recibieron, las aprobaron. Votaron en favor de leyes que no conocían.

IMAGINE que usted va al doctor y éste le receta sin siquiera saber qué síntomas tiene, sin auscultarlo, sin hacerle análisis, sin revisar literatura médica. Así de absurdo fue lo que pasó en el Senado. Absurdo e ilegal, pese a lo cual será una ruta larga y complicada lograr que la Suprema Corte ponga un alto a ese cochinero. ¿Por qué actuaron así las y los senadores de la 4T? Porque pueden, porque no les importa su trabajo, porque se les perdió la dignidad parlamentaria, porque ellos están para el “movimiento”, no para andar elaborando y reformando leyes con análisis, debate y rendición de cuentas.

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POR CIERTO que en el Senado hay personajes de los cuales no se espera nada como el violento César Cravioto que anduvo dando manotazos como energúmeno. Ya para que haya sido la aguerrida Citlalli Hernández quien intentó calmarlo, es porque de plano estaba muy fuera de sí. Félix Salgado Macedonio es otro impresentable. Lucía Trasviña, el verde Manuel Velasco o el petista José Narro son algunos de los que nadie puede entender qué hacen ahí. Sin embargo, quien de plano se vio muy mal fue Ricardo Monreal.

BASTÓ con que lo invitaran a la mesa de las corcholatas en Palacio Nacional, para que Monreal se olvidara de su tan cacareado diálogo con la oposición, de su doctorado en Derecho y hasta de cuál es la función de un senador. Por una foto muy sonriente al lado de AMLO y los otros precandidatos presidenciales, Ricardo Monreal vendió el reconocimiento que se había ganado como factor de equilibrio. ¡Lástima!

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¿SE ACUERDAN de la Luz del Mundo? Es aquella religión que encabezaba el “apóstol” Naasón Joaquín, hoy preso en Estados Unidos por abuso sexual de menores. Bueno, pues resulta que este grupo religioso se encamina a tener su propio partido político.

YA DIO el primer gran paso para lograrlo: obtuvo del INE el registro como Agrupación Política Nacional, bajo el originalísimo y nada lambiscón nombre de Humanismo Mexicano. Exacto: igual que la doctrina del apóstol Andrés Manuel. Esta APN la encabezan tres diputados de Morena: Hamlet Almaguer, Emmanuel Reyes y Favio Castellanos, que se sienten más iluminados que un foco de 100 watts.

 

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