“Entre más conozco a los humanos, más quiero a mi perro”, Diógenes. Esto viene a colación por el dispendio en la estúpida coronación de un idiota como, opino, es Carlos III de Inglaterra.
No llama mi atención el Pan y Circo que significa un evento de coronación, es parte de la naturaleza humana el buscar entretenimiento. Lo que llama mi atención es la estupidez implícita de millones de ingleses y de muchos más en otros países en el mundo, que en pleno siglo XXI creen que hay un designio divino que señala a un idiota como Carlos III, como elegido por Dios para ser el Rey de Inglaterra. El evento de coronación en la Abadía de Westmister, que inicialmente fue un monasterio católico de la orden benedictina, en ese entonces en las afueras de Londres y que con el tiempo se convirtió en la Catedral Protestante para la coronación de Reyes, exhibe la estulticia humana; por cierto, otro ejemplo de la estupidez inglesa y humana es creer que los líderes religiosos tienen la representación divina para otorgar la investidura al Rey o Reina en turno ¡Entendamos!, si existiera un Dios, que si existiera nada tendría que ver con el show de la coronación, no tendría representantes en organizaciones religiosas, en ninguna (no los necesitaría para comunicarse con cada uno de sus hijos en sus corazones), por lo que mi humilde opinión es que todos los autonombrados Ministros, Sacerdotes y representantes de Dios, no son más que simples vividores, algunos de buena fe, los más, gandayas que lucran con la ignorancia y la estupidez humana.
Sobre el mismo tema y en otro tenor, ya hablando de cosas más mundanas, es de llamar la atención que los guardianes de las democracias en el mundo, léase USA y países de la Unión Europea asociados a la OTAN, critiquen a quienes no se gobiernan con estructuras democráticas y pretendan imponerles sus “moditos” (YSQ dixit) a base de fregadazos, mediante invasiones y/o golpes de Estado, esfuerzo que de acuerdo a reglas escritas por ellos, merece ser recompensado, según sus criterios y definiciones legaloides, depredando las naciones disciplinadas (conquistadas) por la fuerza, en defensa de la democracia; no, no estoy inventando, cosa de ver el ataque y destrucción por parte de los “países democráticos” a las dictaduras en Irak, Siria, Libia y Afganistán o a las democracias no alineadas, como la de Chile con Salvador Allende.
Doble moral, doble rasero, veneran a una dictadura como la Arabia porque les compra armas y en función de sus intereses manipula el negocio del petróleo (lo que ya está cambiando), pero critican la estructura de gobierno con un partido de Estado en China o una Teocracia en Irán, pretexto para “establecer sanciones” que de mala manera buscan detener la competencia que de acuerdo a las reglas de libre mercado, “defendidas por los países de Occidente”, deberían regir las relaciones comerciales en el planeta. En otras palabras, el País de la Libertades, USA y sus compinches en Europa, adecuan a como les conviene o para evitar los que no les conviene, las reglas de convivencia internacional y las reglas del mercado; para así frenar a quienes, siendo más capaces y productivos, sacan ventajas de las reglas de libertad impuestas por “las naciones libres” del mundo.
Resumiendo, hablan de libre mercado, pero no de la libertad de ser rebasados por estados más productivos, hablan de defender la democracia, pero veneran a reyes que nadie eligió o respetan dictaduras a conveniencia, hablan de verdad, pero imponen, religiones mentirosas y manipuladoras y hablan de respeto internacional, pero invaden a quienes, por mala suerte, tienen recursos naturales que son de su interés… Ni hablar, si de gringos y europeos se trata, coincido con Diógenes: Entre más conozco a los humanos, más quiero a mi perro… ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión.
Escritor y soñador