Dirigir los destinos de León exige un permanente ejercicio de comunicación con el ciudadano, inclinarse ante las necesidades del otro, programas, políticas, actividades cotidianas y escuchar al pueblo con la mayor atención…. 

También es importante decir que en la difícil tarea de gobernar solo logran el éxito aquellos que son capaces de influir en los otros para cambiar y así mejorar. Además, el gobernante debe de tener la emoción y el coraje suficientes para claudicar a sus intereses personales en favor de los ajenos…

Ale Gutiérrez aspira a un segundo periodo como alcaldesa de León. Durante su gobierno, supo ganarse la confianza de la mayoría de los ciudadanos, debido a su trabajo responsable, honesto y su característica sencillez de trato; aunque falta mucho por hacer, y seguramente en esta segunda ocasión los leoneses serán más exigentes, sobre todo en el rubro de seguridad, agua, servicios y tráfico; pero cuenta con el plus de que ya habría superado la curva de aprendizaje. 

Hay que aplaudir que Ale finalmente pudo sacudirse al Secretario de Seguridad Pública, un espía impuesto desde Paseo de la Presa. Esta decisión y los cambios en la Secretaría de Seguridad del Estado y Fiscalía, que han exigido todos los candidatos a la gubernatura, facilitarán la reorganización de la seguridad y se obtendrían mejores resultados. 

Los gobiernos se sustentan en las buenas opiniones, y existe una buena opinión sobre Ale, la cual debe aprovechar para avanzar y sumar voluntades que seguramente la llevarán nuevamente a la Presidencia Municipal. La opinión pública es un intangible, aunque medible electoralmente, que se debe de cuidar como la quinta esencia… En la vida pública, los castillos de arena pueden derrumbarse en un abrir y cerrar de ojos y acabar así con los elogiosos conceptos del prestigio personal. 

La transparencia, la rendición de cuentas y los resultados son fundamentos clave de la democracia. De la misma manera, el diálogo y la construcción de consensos son condiciones imprescindibles para la cultura democrática y el buen gobierno. “Caminar juntos” es condición de los gobiernos exitosos…

Para Ale, de ganar las elecciones, será necesario honrar sus compromisos de campaña para conservar su buena imagen. En síntesis, el mandato que recibiría de parte de los leoneses sería el de esforzarse para que todo ciudadano sea beneficiario del bien común, de la solidaridad y del principio de subsidiaridad; es decir, que todos puedan vivir y realizar sus sueños y anhelos con dignidad y seguridad. Es urgente reconstruir y nutrir la reputación de la clase política, porque existe una gran desconfianza hacia los políticos y una actitud refractaria hacia las instancias de gobierno, que cada vez acumulan mayor desprestigio. 

En Guanajuato, los gobernadores arriban con buena imagen, pero, por desgracia, al cruzar el pantano algunos ensucian su plumaje; entonces, barruntos de murmuraciones, señalamientos y compadrazgos favoritos provocan una avalancha de fango que se echa sobre sus espaldas, doblegando así lastimosamente el buen prestigio que alguna vez tuvieron. Aunque existen pocas pero honrosas excepciones al respecto.

En el mundo de la vida pública, el rumor es un fenómeno que provoca grandes daños y, aunque se le identifica en la mayoría de las ocasiones como elemento de ruido, no se le puede desactivar. De cualquier manera, el rumor es una forma de comunicación que está vigente y que puede cambiar la imagen o arrebatar la máscara que utiliza alguien para encubrir su verdadero yo.

Pero, ¿qué es este concepto tan importante de “la opinión pública”, del que deben de tener prioridad y cuidado los gobernantes? El concepto no es de acuñación reciente, Maquiavelo ya hablaba de cuidarlo como a la vida misma. En “El Príncipe”, desarrollará las ideas básicas de la comunicación política, teniendo como eje principal la opinión popular. Para Julio César, “la buena o mala opinión de la plebe dependía principalmente del éxito de quien gobierna”. En la actualidad, el politólogo Giovanni Sartori define la crítica y opinión pública como: “Una institución de la democracia”. El presidente Cárdenas decía que “escuchar resolvía la mitad del problema”.

Poner oídos sordos a la opinión pública es de alto riesgo para el gobernante, debido a que los gobernados, ante la evidencia del desprecio a su opinión, se sienten ofendidos, molestos y decepcionados y recurren a la única defensa que les queda: La murmuración, los chismes y los chistes. De cualquier manera, el rumor es una forma de opinión pública que, despreciada, por no ser escuchada ni atendida, toma vigencia cuando se azolvan los canales del diálogo. 

La grandeza de León está en sus sueños. Aristóteles veía la pobreza no como la falta de dinero, sino como la imposibilidad del ser humano de hacer florecer sus capacidades. Para esto, se requiere de la polis, como un conjunto organizado y autosuficiente de personas que han podido realizar sus diversas naturalezas y las ponen al servicio de todos. Esto sería el leitmotiv del ejercicio del poder del próximo gobierno municipal, incluyendo quien resulte ser la oposición: Lograr que León sea una un lugar de realizaciones.

LALC

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