La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 11 de febrero como el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia. Esta fue una acción urgente y ampliamente necesaria. Es importante reconocer las contribuciones de las mujeres en las áreas de la investigación científica, esta fecha tiene como objetivo destruir los estereotipos y erradicar la discriminación contra las mujeres y las niñas en la ciencia. A lo largo de la historia, muchas científicas han dedicado su vida a la investigación y han logrado importantes avances. Algunos ejemplos destacados son los siguientes:
Caroline Herschel. Nacida en Alemania, Caroline (1750-1848) era asistente de su hermano William, quien era astrónomo y construía telescopios. Mientras trabajaba con él, descubrió nuevas nebulosas y cúmulos de estrellas. Entre sus aportes a la ciencia, Herschel fue la primera mujer en descubrir un cometa, la primera dama cuyo trabajo fue publicado por la sociedad científica Royal Society y la primera británica en obtener un salario por realizar trabajo científico. En 1783 esta científica descubrió tres nuevas nebulosas (nubes brumosas donde se forman las estrellas) y, entre 1786 y 1797, descubrió ocho cometas.
Ada Lovelace. Aunque vivió entre los años 1815 y 1852, esta mujer es considerada la primera programadora de ordenadores de la historia y la persona que inició el sistema informático que conocemos en la actualidad, señala el organismo de las Naciones Unidas. Lovelace era colega del famoso matemático y científico británico Charles Babbage, con quien trabajó en la calculadora denominada máquina analítica. Entre sus notas sobre este aparato se encontró el primer algoritmo destinado a ser procesado por una máquina. En su honor, el Departamento de Defensa de Estados Unidos llamó “Ada” a un lenguaje de programación.
Marie Curie (1867 – 1934) fue una física y química polaca pionera en el estudio de la radiación. Sus investigaciones la llevaron a descubrir dos elementos radiactivos: el radio y el polonio. Curie sentó las bases para la ciencia nuclear moderna, desde los rayos X hasta la radioterapia para el tratamiento del cáncer. Además, fundó un instituto de investigación médica en Varsovia e inventó unidades móviles de rayos X que ayudaron a más de un millón de soldados heridos en la Primera Guerra Mundial. Por sus aportes recibió dos premios Nobel y se convirtió en la primera mujer en hacerse de este reconocimiento y en la primera persona en ganar dos premios Nobel en distintas ciencias (en Física en 1903 y en Química en 1911).
Lise Meitner. Fue una física sueca de origen austriaco que vivió entre los años 1878 y 1968. Junto con su compañero de investigación, Otto Hahn, trabajó en el estudio de elementos radiactivos. Meitner calculó la energía liberada en la fisión nuclear y acuñó dicho término. A pesar de su aporte, fue su colega Hahn quien ganó un Premio Nobel por este descubrimiento, mientras que Meitner no fue tomada en consideración por el Comité del galardón.
Rosalind Franklin. Desde muy joven, Rosalind Franklin (1920-1958) supo que quería dedicarse a la ciencia y se doctoró en Química en la Universidad de Cambridge. Esta científica logró hacer una fotografía que mostraba la doble hélice del ADN. Otro investigador del mismo laboratorio, Maurice Wilkins, mostró la imagen a dos compañeros y juntos publicaron el descubrimiento en la revista “Nature”. En 1962, estos tres investigadores recibieron el Premio Nobel por el descubrimiento de la doble hélice del ADN, pero Franklin había fallecido cuatro años antes por cáncer.
Elizabeth Blackburn. Esta científica australiana nacida en 1948 es doctora en Biología Molecular. Blackburn descubrió la telomerasa, una enzima que alarga los telómeros, que son los extremos de los cromosomas, e influyen directamente en la vida de las células. Sus investigaciones sobre la telomerasa contribuyen al estudio de las terapias contra el cáncer. Gracias a la investigación de la telomerasa, esta australiana recibió el Premio Nobel de Fisiología o Medicina 2009 junto con sus colegas Carol Greider y Jack Szostak.
En el Centro de Investigaciones en Óptica, durante esta semana, se llevó a cabo el Congreso de la Mujer en la Ciencia. Todos los asistentes deseamos que eventos de esta naturaleza sean detonadores de numerosas vocaciones científicas.