El presidente de la Federación de Tablajeros del Estado de Hidalgo, Jesús Gutiérrez González, advirtió que el rastro de Pachuca es un riesgo sanitario para los trabajadores, vecinos del establecimiento y los consumidores.
Al cambiar la nueva administración se espera que se corrijan las fallas, pues no sirve la planta tratadora de residuos ni los biodigestores que son necesarios para mantener higiene en el rastro.
Luego de aclarar que los tablajeros no pretenden administrar ni participar en alguna licitación de esas instalaciones municipales, urgió a que haya una intervención oficial.
Expresó que los desechos orgánicos se están arrojando directamente al drenaje, lo que genera fuertes olores en los alrededores y afecta al vecindario poniendo riesgo la salud.
Al no haber un manejo adecuado de la carne, esa puede llegar en malas condiciones a las carnicerías y mercados.
Señaló que hasta ahora no ha habido una intervención oficial, aunque hay esperanzas de que el alcalde Jorge Reyes mejore ese espacio municipal.