León, Guanajuato.- Si eres de los que cada día sientes la tentación de presionar el botón de repetición del despertador, el famoso “snooze”, o de los que de manera rutinaria posterga la alarma cada cinco minutos, debes saber que esto no es conveniente.

Expertos del Hospital Houston Methodist explican lo perjudicial que es acostumbrarse a posponer la alarma, decisión que una versión somnolienta del cerebro toma y que se da debido a un fenómeno conocido como “inercia del sueño”. 

Los expertos explican que la inercia del sueño se caracteriza por el aturdimiento que se siente al despertar; es el estado temporal entre estar dormido y estar despierto, y cuando se juntan la inercia del sueño con la comodidad de la cama, el frío y la oscuridad, puede ser difícil resistirse a postergar la alarma.

De acuerdo a la doctora Aarthi Ram, neuróloga especializada en medicina del sueño del Hospital Houston Methodist, este hábito no vale la pena y explica que, no te sentirás más descansado al postergar tu alarma unos minutos más.

¿Por qué no debes posponer el despertador?

El problema de posponer el despertador es que ese sueño fragmentado, además de no tener beneficios, podría afectar el resto de tu día.

Los 10 minutos adicionales de sueño que te estás regalando, una y otra vez, no son de sueño productivo y ese sueño interrumpido lo que hará es que te sientas más aturdido”, enfatizó la doctora Ram.

 

Agregó que al presionar el botón de repetición de la alarma del despertador lo que podría pasar es que la gente podría dormir demasiado o deshacer su ciclo de sueño y ambas situaciones podrían aumentar las posibilidades de que la persona se sienta más cansada durante el día.

Para empezar, sí, es posible dormir demasiado y, aunque suene contradictorio, dormir demasiado en realidad causa más sueño durante el día. Al posponer la alarma, porque sabes que no has dormido lo suficiente, podrías alterar el reloj interno de tu cuerpo, interrumpiendo procesos biológicos importantes. Esto, además de causar posible fatiga, también podría tener consecuencias sobre tu metabolismo, niveles de energía y demás.

Los estudios sugieren que los efectos de la inercia del sueño se vuelven más intensos si te despiertas durante el sueño conocido como profundo, también llamado sueño REM, así que presionar el botón de repetición muchas veces puede dejarte más aturdido de lo habitual. Esto además podría tener un impacto para la persona que duerme en la misma cama, habitación o incluso en la misma casa, dependiendo de qué tan fuerte sea la alarma.

 

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