Sentado arriba de una cama de color negro donde atiende a los jugadores y con una vestimenta completa de color vino, Alejandro Ávila vive toda una experiencia en el Festival Máster de Voleibol en el primer año de su clínica de fisioterapia.
Originario de Puebla, también disfruta jugando al voleibol, aunque en esta ocasión, su trabajo es distinto fuera de la duela.
“Ya hemos participado en este tipo de eventos, pero nos dedicamos de lleno a la fisioterapia. Nuestro trabajo es importante porque un buen diagnóstico permite al deportista seguir jugando y prevenir probables lesiones, pues nadie está exento de ellas”.
Su sentir sobre el evento
Cuatro días de asistencia le han permitido a Alejandro formar una visión de cómo es el torneo desde su percepción.
“He visto una muy buena convivencia, con gente de todos lados, quienes son muy amables y apasionados por este bonito deporte”.
Sin embargo, son pocos días para poder comparar la difusión de este deporte con su ciudad natal, en la cual sí cataloga una falta de divulgación.
“Sí hace falta difusión en Puebla y creo que todo esto se debe a la falta de publicidad que yo creo es lo principal”.
La satisfacción de esta profesión
Junto a su socia Josseline Cancino, han podido crear su clínica EIRA, nombre que tiene su origen por la mitología nórdica, pues es el nombre de la diosa de la sanación.
“Llevamos cuatro años en esta profesión, pero un año cumplido en nuestra clínica. Ha sido difícil poder mantenerse porque en Puebla existe mucha competencia en este sentido, sin embargo, vamos paso a paso y este tipo de eventos nos ayuda”.
La más grande satisfacción para Alejandro a la hora de ejercer esta profesión, es ayudar a sus deportistas.
“Es una enorme satisfacción y un sentimiento muy padre el agradecimiento de los deportistas. ¿Sabes? El que te digan que gracias a ti jugaron sin dolor o que se recuperaron de una lesión de la que no creían salir, es algo tremendo en esta profesión”.
Un aprendizaje importante
A falta de dos días para culminar este evento, el gran aprendizaje que se lleva Alejandro Ávila es bastante importante para su entorno profesional y social.
“De aquí me llevaré gratos recuerdos, una experiencia maravillosa al crear varias amistades que sirven en lo profesional, pero sobre todo en lo personal. Este tipo de competencias siempre es importante para seguir forjando nuestra personalidad”.
Así, con un mar de ilusiones y esperanzas, a la par de llevar consigo una enorme responsabilidad, Alejandro Ávila y Josseline Cancino, ejercen una profesión bastante importante para mantener en forma a todos los deportistas y que puedan activarse a través del deporte.