Fueron 263 días en los que el beisbol desapareció de territorio leonés, producto de una temporada pasada sin playoffs y un receso que se alargó en demasía.
A pesar de ello, la expectación e ilusión por ver a su equipo triunfar no se borró en estos ocho meses de ayuno y, con expectación, la afición disfrutó el regreso al Domingo Santana, casa de los Bravos de León.
Es el caso de Haziel Omar Morales quien, más allá de vestir “normal”, tenía un semblante totalmente feliz en la explanada del Domingo Santana.
MARÍA LEÓN ENTONÓ EL HIMNO EN EL BRAVOS VS LEONES.
Y es que la felicidad lo puede borrar todo, incluso aquel estrés al hacer fila para comprar un alimento.
“Está muy padre todo este ambiente, la verdad es que ya se extrañaba y qué mejor cuando el equipo lo hace bien. Este año tenemos que clasificar y aquí estaremos para apoyar”, comentó el fanático en plena apertura de la campaña 2023 en la Liga Mexicana de Beisbol.
Apoya la afición
Apoyar es una palabra que existe notoriamente en el vocabulario beisbolero de Gerardo Martínez, quien después de seis temporadas, espera al pie del cañón la mejora de su equipo en el diamante.
“La verdad es que pinta complicado, sabemos que el pitcheo siempre ha sido nuestra debilidad, pero esperamos que esta temporada sí existan mejores jugadores en el pitcheo”.
Sin embargo, más allá de lo que pueda desarrollarse dentro del diamante, su semblante sigue siendo de alegría al observar una nueva característica en el recinto.
“Aquí se ve muy bien, se ve mucha más comida y eso está perfecto la verdad”.
Bravos quiere playoffs
Una verdad que se ejemplifica con Mario Rodríguez que, enfundado en el jersey melenudo de la campaña pasada, espera por su comida mientras reflexiona el malestar del equipo en reiteradas campañas.
“En pretemporada anduvieron muy bien, pero falta ver esta hora de la verdad porque en el pitcheo siempre hemos estado muy débiles, pero esperamos que esta temporada ya sean mejores jugadores”.
Quizás no tan efusivo, pero sí concreto a la hora de expresarse, Rodríguez se alegra al ver de regreso una pelota blanca de 108 costuras volar sobre un terreno en forma de diamante.
“Es una felicidad inmensa, uno siempre sufre cuando no hay beisbol tanto aquí como en las Grandes Ligas y pues qué bueno que regreso”.
Un regreso a playoffs que los Bravos de León esperan concretar en esta nueva travesía que ha arrancado en una calurosa noche de abril.