Pío López Obrador no supo lo que hizo al demandar 200 millones de pesos a Carlos Loret de Mola, otros 200 a Latinus, y 200 más a David León Romero.
Alega daño porque Loret difundió un video donde recibe pacas de dinero en sobres amarillos para la campaña de su hermano Andrés Manuel. O para cualquier otra cosa. El efectivo no tiene rastro.
Loret recibe un regalo del oficialismo porque se convertirá en un circo nacional donde Pío tendrá que contestar muchas preguntas que aún no tienen respuesta. ¿De dónde venía el dinero? ¿Por qué lo filmó el personero del gobernador de Chiapas? ¿Cuál fue la razón por la que salió de las manos del grupo en el poder?
Para Loret será una fiesta porque ningún juez se atreverá a poner las cosas al revés. Quien delinque demanda al periodista revelador de la corrupción. La suma es ostentosa, absurda y no tiene fundamento. Como dice el periodista: ¿qué negocios perdió el hermano del presidente por la difusión de su delito?
En el fondo la demanda es un ataque a la libertad de expresión, un acto de intimidación que cuesta tiempo y dinero para el demandado. Pero al final Pío podría encontrarse con una enorme cuenta de costas de abogados cuando finalmente pierda el caso. Si demandó por 600 millones, de perder el caso las “costas” de abogados y litigios podrían valer 30 millones que tendría que pagar.
En México la justicia tarda y un pleito de esta naturaleza podría durar años. También hay jurisprudencia en casos como el de Humberto Moreira perdiera en la Suprema Corte de Justicia cuando quiso intimidar al columnista Sergio Aguayo con una demanda de 10 millones.
Otro efecto benéfico del desvarío de “príncipe de los sobres” es que el periodismo independiente se unirá en torno a Loret, porque si se lo hacen a él, se lo pueden hacer a cualquiera. De prosperar el asunto para Pío, sería el final de la libertad de expresión en México. Cualquier político o persona de influencia podría judicializar información legítima y útil para los ciudadanos.
Loret, al dar a conocer la entrega de dinero oscuro, ayuda a que veamos cómo circularon y circulan miles de millones de pesos en efectivo entre la clase política.
Otra ventaja del director de Latinus es el tiempo. Faltan apenas 7 meses para el fin del sexenio. Si gana Xóchitl las presiones disminuirán sobre los juzgadores; si gana Claudia, no querrá inaugurarse defendiendo lo indefendible.
El precedente que tendrá este caso dará la pauta para el futuro de nuestras libertades, siendo la de expresión, piedra de toque de todas las demás.
¿Quién aconsejó al hermano de Andrés Manuel? Él apoyaba a Marcelo Ebrard, un político prudente y profesional que por ningún motivo impulsaría una demanda de ese tamaño. Si el presidente lo ve como otra “caja china” y distraer la atención de problemas graves que le inquietan como la inseguridad y las elecciones, lograría exactamente lo contrario, encender otra fogata.
Lo peor para Pío: demanda a quien le entregaba dinero habitualmente. David León conoce el monto, el origen y el destino del dinero. Si lo acusan de filmar la entrega, puede alegar que era la comprobación del “donativo”. Una locura que incluso podría costar mucho a Andrés Manuel.
**Vota sin llevar sobres amarillos**